EL GRECO
Sala 9b. Cat. P823. 1597-1600. Óleo sobre lienzo. 312 cm × 169 cm.
También esta obra posee la poderosa impronta de Orozco, quien, a raíz de sus visiones orando ante un crucifijo, compuso un relato muy vívido y lleno de detalles de la Pasión de Cristo. Su mentora, María de Aragón, encargó al Greco una serie de cuadros de acuerdo con estas visiones. Dos pruebas marcan la relación Greco-Orozco también en este cuadro:
• El pie derecho del crucificado está sobre el izquierdo, al contrario de lo que sucede en el resto de las obras del Greco y en la mayoría de las pinturas de este motivo. Así lo dejó escrito el beato Orozco.
• También el chorro de sangre que brota de Jesucristo figura en sus escritos.
Ante la pregunta de Javier Sierra de por qué el Greco pintaba de esa forma tan característica la figura humana, Fovel le explicó la teoría del historiador Elías Tormo y Monzó, según la cual el pintor fue uno de los que quisieron retratar una humanidad distinta a la que pertenecemos la mayoría.