LOS MISMOS. UN MÉDICO.
MALCOLM:
Hablaremos después. ¿Viene ya el rey?
MÉDICO:
Multitud de infelices esperando
aun están a su alteza. Enfermedades
sufren que el arte combatiera en vano;
pero tal santidad diera, al monarca
el poder de los cielos, que curados
quedan aquellos que su mano toca.
MALCOLM:
Gracias, doctor.
MÉDICO:
Os guarde el cielo santo.
(Sale).