MACDUFF.
MACDUFF:
¡Despertad, despertad! ¡Ah del castillo!
Dejad del sueño las delicias vanas;
toquen rebato lúgubres campanas,
traición, traición, levántese el rastrillo;
Tú, Malcolm, Donalbain, Banquo fuerte,
acudid, acudid con vista umbría
cual si salieseis de la huesa[28] fría
y en vez del sueño encontraréis la muerte.
(Suena una campana).