Escena XI§

MACBETH. LADY MACBETH.

LADY MACBETH:

Señor de Cawdor y Glamis y príncipe soberano,

la ignorancia del presente tus[17] letras han disipado;

ya en mi espíritu arder siento de futura gloria el lampo[18].

MACBETH:

Esta noche llega Duncan a nuestro castillo.

LADY MACBETH:

¿Y cuando

partirá?

MACBETH:

Creo que mañana.

LADY MACBETH:

Nunca brillará el sol claro

de ese mañana al rey Duncan. Mas… hechos extraordinarios

pudieran leer los hombres en tu semblante alterado.

Para engañar a los tiempos confórmate a sus mandatos:

tus ojos amor irradien y bien venidas tus labios.

Inocente flor el rostro, resplandezca con halagos;

mas áspid el alma sea bajo el follaje enroscado.

Pensemos en el que viene y deja solo a mi cargo

las empresas de esta noche, do nacerán días colmados.

de grandeza y de dominio.

MACBETH:

Hablaremos con despacio

de ese asunto.

LADY MACBETH:

. Mas despeja la frente y los ojos en tanto,

que siempre el temor indica…

(Entra un CRIADO).

CRIADO:

Señor, el rey ha llegado.

(Vase).

LADY MACBETH:

. Vé a su encuentro sin tardanza

y ábrele alegre tus brazos.

(Parte MACBETH).