El nombre de Alexis Máquina no es original mío. Los lectores de Dead City («Ciudad muerta»), de Shane Stevens, lo reconocerán como el nombre del ficticio jefe de los rufianes de esa novela. El nombre resumía con tanta exactitud la personalidad de George Stark y de su propio personaje de ficción que lo adapté para la obra que acaba de leer. Pero también lo hice como homenaje al autor, Shane Stevens, entre cuyas novelas figuran Rat Pack [Nido de ratas], By Reason of Insanity [Por causa de locura] y The Anvil Chorus [El coro del yunque]. Estas obras, donde la llamada «mente criminal» se une a un estado de psicosis irrecuperable para crear su propio sistema cerrado de maldad absoluta, son tres de las mejores novelas que se han escrito nunca sobre la cara oscura del sueño americano. Son, a su modo, tan impresionantes como McTeague, de Frank Norris, o Sister Carrie, de Theodore Dreiser. Yo las recomiendo sin reservas, aunque solo a los lectores de estómago fuerte y nervios aún más templados.
S.K.