LA MAGIA RÚNICA DE LOS PATRYN
TEORÍA Y PRÁCTICA
Cuando los patryn quieren alterar alguna parte del mundo, primero tratan de «nombrar» completamente el objeto. El nombre verdadero de un objeto es mucho más que una descripción fiel. En la magia patryn, el nombre del objeto define con precisión el estado del objeto en relación con la Onda de Posibilidad fundamental. Nombrar el objeto completamente es decisivo para el nivel de éxito que los patryn conseguirán más tarde, cuando «renombren» el objeto en una forma o estado modificados.
Las runas proporcionan una serie de símbolos mediante los cuales podemos nombrar (entender) y renombrar (cambiar) cualquier objeto. El estudiante de magia patryn es un estudiante de la runa, pues sólo mediante las runas se puede nombrar plenamente un objeto.
Teoría y conceptos
Las runas dan estructura formal a nuestra magia. En general, nuestras runas forman la magia dando los siguientes pasos:
Las Leyes de Rethis
Aunque los principios de la magia rúnica se conocían desde muchas eras antes de la Separación de los Mundos, seguían existiendo anormalidades e inconsistencias en la formación de la magia. Uno de los grandes avances en la investigación mágica fue la definición de tales anormalidades.
Sin embargo, en el año de nuestro Exilio de 1391, el sabio Rethis del Vórtice[32] estructuró varias leyes básicas de la magia rúnica, con las que se propuso dar explicación a las anomalías que se habían experimentado desde el inicio de los tiempos. Aunque al principio sus trabajos fueron acogidos con tal escepticismo que le valieron la muerte por sentencia de los Señores del Exilio, tiempo después fueron aceptados por dicho organismo supremo y son hoy la base de nuestra comprensión de la magia.
EL EQUILIBRIO EN TODA LA NATURALEZA
Rethis partía del entendimiento de que todas las cosas deben poseer equilibrio para existir. El nombre completo de un objeto tiene equilibrio porque define el estado de existencia armónica en la Onda de Posibilidad. Aunque tal principio era ampliamente conocido entre los magos rúnicos, fue Rethis quien lo estableció como base de su razonamiento. Así, la Primera Ley de Rethis dice:
El nombre de un objeto tiene equilibrio
FACTOR DE EQUILIBRIO
Uno de los mayores enigmas de la magia era su tendencia a escaparse de las manos en ocasiones. La estructura rúnica del hechicero funcionaba exactamente con los efectos previstos en una serie de objetos parecidos para, de pronto y sin ninguna razón evidente, tener un efecto distinto en otro objeto prácticamente idéntico a los renombrados con anterioridad.
Este efecto, apuntaba Rethis, es parecido a los que se ven una y otra vez entre los aprendices que dan sus primeros pasos en el dominio de las runas y que, a menudo, estructuran runas que no están equilibradas. Dichas runas desequilibradas siguen funcionando, pero con extraños resultados, en muchas ocasiones.
Rethis propuso que dichas estructuras imperfectas seguían funcionando porque la magia en sí buscaba su propio equilibrio cuando la runa no se lo proporcionaba. Esto se convirtió en la Segunda Ley de Rethis:
Un nombre desequilibrado tenderá a equilibrarse a sí mismo
DESEQUILIBRIO RÚNICO
Habiendo establecido las dos primeras leyes, Rethis atacó directamente el problema de los maestros hechiceros que, pese a todos sus conocimientos, veían cómo en algunas ocasiones sus runas mágicas se comportaban caprichosamente.
Dado que los hechizos de los aprendices debían obviamente sus resultados indeseados al desequilibrio de la estructura, y a la vista de que los encantamientos de los maestros hechiceros mostraban fallos similares (aunque mucho menos frecuentes), Rethis pensó que debía de existir alguna relación entre todos ellos. El sabio se planteó qué podía causar el desequilibrio en los encantamientos de un maestro hechicero.
GRANO DE MAGIA Y VARIABILIDAD
Trabajando en estos problemas, Rethis descubrió una oscura monografía remitida al Liceo donde el sabio realizaba sus investigaciones. La obrita había sido escrita por Sendric Klausten, un corredor del Nexo que gozaba de gran fama en el Laberinto pero era poco conocido en el Vórtice. Al parecer, había sido redactada en uno de los pocos retornos a través de la Primera Puerta y se basaba en la experiencia de dicho corredor en el Laberinto.
Los corredores del Nexo intentaban abrirse paso desde el Laberinto hasta el legendario Nexo del otro lado. En esos primeros tiempos, el esfuerzo estaba todavía en pañales y transcurrirían muchos siglos antes de que los corredores tuvieran éxito.
Para comprobar la efectividad de las runas, no había mejor campo de pruebas que el Laberinto, pues en éste precisaban una mayor complejidad y finura que en su empleo habitual en el Vórtice. Klausten, en sus aventuras por el Laberinto, descubrió que había un límite real en cuanto al detalle con que podía construirse una runa.
El equilibrio en la magia y la definición última de la probabilidad que se está urdiendo son fundamentales para quien emplea la magia de las runas. A menos que la onda mágica sea infinitamente precisa, su efecto será diferente en detalle del concebido originalmente por el mago. Toda la teoría de las runas busca definir el equilibrio de la runa como Nombre Resonante del objeto existente.
Como ya sabrá el aprendiz, las estructuras rúnicas contienen otras estructuras rúnicas. Esta progresión, aparentemente infinita, de niveles de detalle cada vez más pequeños y minuciosos pretende redefinir el estado equilibrado y ordenado de un objeto en otro estado. Cada nivel de detalle define el objeto más íntimamente que el anterior hasta que, en teoría, queda plenamente definido y, por tanto, equilibrado.
Klausten descubrió, sin embargo, que conforme la runa se hace más y más detallada, la presencia de la propia runa afecta al estado del objeto. Según dejó establecido Klausten, se puede construir una runa con tal detalle que el propio detalle afecte, a su vez, al objeto que el mago pretende modificar. De este modo, el nombre del objeto experimenta unos sutiles cambios. La runa —equilibrada para el objeto antes de que éste sufra dichos cambios sutiles— resulta entonces desequilibrada. Un nuevo reequilibrio de la runa a estos niveles no haría sino modificar de nuevo el objeto, lo que llevaría a un nuevo desequilibrio de la runa. Así pues, según el planteamiento de Klausten, existe un límite en cuanto al detalle con que puede construirse una runa para que afecte a un objeto determinado. A este límite, Klausten lo denominó Barrera de Incertidumbre.
La Barrera de Incertidumbre es un nivel de definición más allá del cual las runas no pueden penetrar. Este límite a la progresión en detalle de la runa guarda una evidente relación con la antigua Constante Empírica (6,547E27, o h), aunque su explicación sigue siendo un misterio.
Más allá de la Barrera de Incertidumbre, las estructuras rúnicas no ejercen los efectos previstos. Los magos que profundizan en tales sutilezas de habilidad no parecen encontrar el modo de lograr nuevos reequilibrios al alcanzar este nivel.
Este nivel básico de detalle en la estructura de la runa (que se ha demostrado vigente tanto en la magia de los patryn como en la de los sartán) es conocido como el Grano de runa. Se entiende éste como la estructura más detallada que puede construirse mediante runas sin que la presencia de éstas modifique la propia magia que se pretende llevar a cabo.
TERCERA LEY DE RETHIS
Rethis encontró en los escritos de Klausten la clave de por qué incluso la magia más detallada falla en ocasiones. El sabio elaboró la teoría de que si el objeto que se iba a renombrar estaba equilibrado más allá de la Barrera de Incertidumbre, ninguna runa podría producir un Nombre Resonante con suficiente detalle como para renombrar tal objeto en equilibrio. Así, su propia Segunda Ley actuaría ocasionalmente con resultados aleatorios incluso en los hechizos de los magos más expertos.
Y fue así cómo Rethis formuló su tercera y más controvertida ley:
Ninguna runa posee equilibrio infinito
Cuando una estructura rúnica se aproxima a un nuevo estado, la Onda de Probabilidad produce un fenómeno llamado Reflejo de Estancamiento. En esencia, este reflejo es la manera que tiene la naturaleza de corregir los pequeños desequilibrios de todas las estructuras de runas mágicas que puedan manifestarse a través de la Barrera de Incertidumbre.
La Tercera Ley de Rethis se ha reformulado en ocasiones como «ninguna runa es perfecta». La Barrera de Incertidumbre parece condenar las estructuras rúnicas a una imperfección elemental cuando se está actuando con la magia en sus detalles más delicados.
Sin embargo, aunque esto resulte ser bastante perturbador desde el punto de vista filosófico, en el uso cotidiano tiene escasa importancia pues, dado que la Segunda Ley de Rethis nos dice que incluso un objeto desequilibrado tiende a buscar su propio equilibrio, la magia rúnica sigue funcionando como la gran fuerza en nuestro destino.
Con todo, fueron las ramificaciones filosóficas de sus postulados lo que perdió a Rethis. Los Señores en el Exilio lo procesaron por hereje anarquista y lo sentenciaron a muerte. Hoy se entonan canciones en su honor, pero Rethis no tuvo oportunidad de oír ninguna en vida.
MAGIA DIMENSIONAL Y DESARROLLO FUTURO
Todas nuestras estructuras rúnicas actuales se basan en unos modelos bidimensionales. Nuevas investigaciones llevadas a cabo por los maestros criptógrafos del Vórtice apuntan a que también se podrían construir estructuras rúnicas estables de características tridimensionales. Tales runas pueden concebirse aproximadamente como cajas, esferas, multihadrones y una serie de diferentes conductos de paso para la transferencia de energía y para la definición del efecto.
Aunque tales estructuras tridimensionales podrían representar una revolución en las estructuras rúnicas y su poder, todavía no se ha desarrollado ninguna que conserve la estabilidad como las que utilizamos tradicionalmente. Las estructuras dimensionales parecen estar sometidas también a la misma Barrera de Incertidumbre que las runas normales. Quizá, con el tiempo, tales runas formarán parte de nuestra sociedad y nuestro propósito.