[1] Escrito íntegramente por Percy Bysshe Shelley, marido de la autora, a quien algunos atribuyeron inicialmente la obra. <<
[2] El médico inglés Érasmus Darwin (1731-1802), amigo de los Godwin y abuelo del evolucionista Charles Darwin (1809-1882), fue uno de los científicos más afamados de su época. <<
[3] Según la introducción de Mary Shelley al Frankenstein de 1831, había más de dos amigos; lord Byron, Shelley, John W. Polidori, y Claire Clairmont, hermanastra de la autora. <<
[4] Aunque en la edición de 1818 esta afirmación era cierta, hay que recordar que en 1819 Polidori publica El Vampiro, un cuento; por tanto, esta afirmación no será válida para la edición de 1831. <<
[4b] Señores Colbum y Bentley, 1831. <<
[5] Estructuralmente, Frankenstein sigue la forma epistolar tan popular en el siglo XVIII. <<
[6] Afirmación un tanto exagerada, ya que en estas latitudes el día y la noche alternan en períodos de seis meses. <<
[7] Esta curiosa idea de una región polar de aguas templadas no es invención de Mary Shelley, sino legendaria, y George Best en su obra Hakluyt's Voyages (Viajes de Hakluyt) (1589) hace una viva defensa de esta teoría. <<
[8] Aquí conocemos cuál de las famosas rutas es la que Walton piensa descubrir. No será el primero en intentarlo; ya en 1533 y 1580 hubo dos exploraciones inglesas que zarparon con este fin y regresaron sin éxito. <<
[9] Es decir, cuando tenía veintidós años. Más adelante sabremos que Walton tiene ahora veintiocho, un año más que Víctor Frankenstein. <<
[10] Fundado en 1583 por los ingleses, este puerto sobre el mar Blanco fue durante más de un siglo el único acceso de Rusia al comercio con Occidente. <<
[11] El frío y, en particular, el hielo son elementos de primordial importancia en la obra. La historia comienza y termina en un paraje helado, y la escena principal entre Víctor Frankenstein y la criatura que ha creado se desarrolla en un glaciar de los Alpes suizos denominado «el mar de hielo». <<
[12] Hay cierta imprecisión en cuanto a los mandos de la tripulación. Un poco más adelante a Walton le llamarán «capitán» y unas líneas más atrás se nos ha hablado del «lugarteniente», rango militar a bordo de un barco civil. <<
[13] Referencia al poema del inglés Samuel T. Coleridge (1772-1834) The Rime of the Ancient Mariner (La balada del viejo marinero), en el cual un marinero mata a un albatros, acarreando devastadoras desgracias para toda la expedición. <<
[14] Esta carta es la más larga, pues en ella queda incluido el resto de la obra, aunque en el volumen III la forma epistolar se convierte en el diario de Walton. <<
[15] Este intercambio de formulismos en pleno Ártico es la manera como Mary Shelley nos demuestra que ambas son personas educadas y de gran sensibilidad, cualidades muy apreciadas en la época romántica. <<
[16] El desarrollo de esta doble existencia, si bien no en el sentido en que la interpreta Walton, es un tema importante en Frankenstein. <<
[17] El visitante lleva veinte días a bordo y, sin embargo, Walton sigue refiriéndose a él como «el extranjero». <<
[18] El final de la carta 4 cierra el prólogo temático y narrativo a lo que será la narración central. Con el capítulo 1 empezamos la lectura de Frankenstein propiamente dicho, relato que el extranjero le dicta a Walton durante una semana (20 a 26 de agosto). <<
[19] En la edición de 1831 se mantiene está referencia al nacimiento de Víctor en Ginebra, a pesar de que página y media más adelante leemos «Yo [Víctor], su hijo mayor, nací en Nápoles». <<
[20] Históricamente, Ginebra gozó de cierta independencia hasta el 12 de septiembre de 1814, fecha en que se une a Suiza. <<
[21] Con frecuencia se da la denominación de país a lo que actualmente conocemos como cantones. <<
[22] Río que pasa por Lucerna. <<
[23] Orlando, héroe del Orlando furioso de Ariosto (1474-1533). Amadis, figura principal de Amadís de Gaula, primera novela española de caballería, de paternidad discutida. San Jorge, patrón de Inglaterra. Robin Hood, héroe legendario inglés de la época de Juan Sin Tierra, en cuyas aventuras se inspiró Walter Scott para su Ivanhoe. <<
[24] Lo que hoy se conoce por ciencias físicas. <<
[25] Antigua ciudad de Suiza, en la orilla sur del lago Ginebra. <<
[26] Heinrich Cornelius Agrippa von Nettesheim (1486-1535), filósofo, astrólogo y alquimista alemán, gran aficionado en su juventud a la alquimia y a las ciencias ocultas, fue un destacado defensor de la mujer, dato que debía revestir un interés especial para M. Shelley. <<
[27] Esta es la primera vez que se menciona el nombre del protagonista. <<
[28] Los descubrimientos químicos más importantes de fines del siglo XVII correspondían a un mejor conocimiento de la naturaleza de los gases. <<
[29] Paracelso (nombre con que se conoce a Theophrastus Bombastus von Hohenheim) (1493-1541), médico suizo con reputación de alquimista, cuyas teorías son una mezcla de la filosofía griega y la incipiente ciencia experimental. San Alberto Magno (1193-1280), dominico alemán, maestro de Santo Tomás de Aquino, junto con el cual introdujo la perspectiva aristotélica en el pensamiento cristiano. <<
[30] Quizá Víctor esté pensando en la creencia de Alberto Magno de que había una corriente de causalidad que, emanando de las estrellas, tocaba literalmente el embrión humano y determinaba así su vida; quizá se refiera a la idea de Paracelso de que el creador del mundo es una especie de alquimista divino, cuyo trabajo consiste en separar de la informe materia prima las cosas del cielo y la tierra. En cualquier caso, la obra de ambos autores no se consideraba loca en su día. <<
[31] Para los alquimistas era dogma de fe que, de seguirse los procedimientos adecuados, la materia se podía perfeccionar. A este fin postulaban la existencia de una piedra filosofal, de la cual se decía que el que la poseyera podría transformar en oro los metales secundarios. El elixir de la vida supuestamente confería la inmortalidad a la persona que lo destilara. <<
[32] El escocés James Watt (1736-1819) desarrolló en 1765 el condensador y el regulador centrífugo que hicieron práctico y económico el empleo de la máquina de vapor en la industria. <<
[33] Pequeño pueblo al sur del lago Ginebra. <<
[34] Cordillera que se extiende entre Francia y Suiza. <<
[35] Según la teoría del flogisto, del químico alemán Georg E. Stahl (1660-1734), los relámpagos y la misma luz eran una especie de fluido que se desprendía a consecuencia de la combustión. <<
[36] Plinio el Viejo (23-79) y G. L. Buffon (1707-1788), naturalistas romano y francés, respectivamente, escribieron ambos una Historia Natural, obras bien conocidas y admiradas por los Shelley. <<
[37] Universidad alemana fundada en 1410, tenía fama por su facultad de Medicina. Era arriesgado mandar a esa universidad al joven Víctor de diecisiete años, hijo de una tranquila familia burguesa. En Ingolstadt se fundó, en 1776, la Sociedad de los Iluminados, que postulaba, entre otros puntos, la abolición de la propiedad privada, la religión y el matrimonio. <<
[38] En esta edición de 1818, Elizabeth sufre una escarlatina leve, mientras que en la edición de 1831 la enfermedad se presenta como un caso grave, resuelto favorablemente gracias a los cuidados de la señora Frankenstein, que paga por ello con su propia vida. Quizá el cambio obedezca a un deseo de acentuar el paralelo entre Elizabeth y Mary Shelley, cuya madre, como sabemos, murió al dar a luz a la autora. <<
[39] Cita del poema del inglés Charles Lamb (1775-1843), The Old Familiar Faces (Las viejas caras conocidas). <<
[40] Este logro espectacular nos llega tras una explicación en la que la autora, con gran destreza, ha evitado dar cualquier detalle. Esta poca concreción no es de sorprender si se tiene en cuenta que Víctor ha conseguido «lo que desde la creación del mundo había sido motivo de afanes y desvelos por parte de los sabios». Bajo estas circunstancias se puede disculpar a Mary Shelley el que no nos dé mayores explicaciones científicas. <<
[41] Referencia al «Cuarto viaje de Simbad» de Las mil y una noches. <<
[42] Pie: sistema británico de medidas. Un pie equivale a 30,48 cm. <<
[43] Es la primera vez que se emplea el término monstruo. Veremos cuánto escasea este vocablo; a lo largo de toda la obra no aparece más de media docena de veces, empleándose en su lugar términos como vil ser, villano, demonio. <<
[44] Cita de The Rime of the Ancient Mariner (Balada del viejo marinero) de Samuel T. Coleridge, asiduo visitante de casa de los Godwin. <<
[45] Novela del inglés Oliver Goldsmith (1730-1774). <<
[46] En la edición de 1831 esta carta se modificó totalmente, eliminándose de ella la cáustica visión del mundo de las leyes al hacer que Ernest piense seguir la carrera militar en lugar de la de Derecho. <<
[47] Angélica es la heroína del Orlando furioso de Ariosto. <<
[48] Llanura arbolada al sur de Ginebra. <<
[49] Utiliza esta expresión en el sentido de pertenecer a una misma comunidad, aquí, la familia de Víctor. <<
[50] Marcus Porcius Catón, filósofo estoico romano (95-46 a. C.). <<
[51] Cita del Childe Harold's Pilgrimage (La peregrinación de Childe Harold), de lord Byron, cuyo manuscrito del canto III vieron los Shelley en 1816. <<
[52] Pueblecito al noroeste del lago Ginebra. <<
[53] Han pasado dos años (y muchas páginas) sin que se haya hecho referencia a este ser. <<
[54] La observación de Víctor es un reflejo directo de un aspecto de la tradición europea sobre vampiros, que sostiene que la primera víctima de un vampiro es alguien muy allegado a él. <<
[55] Sistema de voto secreto muy empleado en la pena de muerte. Las bolas solían ser de marfil o de madera, y las negras, evidentemente, significaban un veredicto negativo. <<
[56] Tanto Shelley como su mujer estaban en contra de la pena de muerte. <<
[57] Afluente del río Arve. <<
[58] Glaciar de unos cien kilómetros en el valle de Chamonix y donde se sitúa el mar de hielo, lugar inhóspito y desolado. <<
[59] Cita del poema de Shelley Mutability (Mutabilidad), escrito en 1815. <<
[60] Es ésta una de las numerosas invocaciones a los espíritus que salpican la obra. Es de destacar que ni Víctor ni su criatura invocan jamás a Dios directamente; Elizabeth lo hace, pero sólo con expresiones convencionales. Evidentemente, M. Shelley, aunque quería dotar a sus personajes de trascendentalismo, no deseaba que admitieran la presencia de Dios en su mundo, lo cual no es de extrañar en una joven que compartía totalmente el ateísmo de su padre y su marido. <<
[61] Este es el primer diálogo que sostienen Víctor y la criatura, si bien no son las primeras palabras que ésta ha pronunciado. La alternancia de tratamiento entre el «vos» y el «tú» con que la criatura se dirige a Víctor es constante e intencionada; se emplea el «vos» para acentuar la analogía Dios/Adán que subyace en la relación entre ambos. <<
[62] Aquí empieza la tercera narración de que se compone Frankenstein: la autobiografía de la criatura. <<
[63] En El paraíso perdido de Milton, el Pandemonio era la ciudad edificada y habitada por los ángeles caídos. <<
[64] Se refiere a la fábula del poeta francés La Fontaine (1621-1695), El asno y el perrito (libro IV, fáb. 5). <<
[65] La criatura, siguiendo a Godwin, se nos presenta como «buena» inicialmente. Su envilecimiento progresivo se debe a la hostilidad de la que es víctima. <<
[66] Constantin Frangois de Chasseboeuf, conde de Volney (1757-1820), fue apasionado defensor de las libertades humanas y de la Revolución francesa. Gran estudioso del mundo árabe, realizó, siendo muy joven, un viaje de Egipto a Siria, para el cual se preparó concienzudamente, al igual que Walton para el suyo. <<
[67] Visión típicamente europea del harén turco, si bien incorrecta, si se tiene en cuenta la obra del americano N. M. Penzer The Harem (El harén) (1937). En ella se describe el harén como «un mundo en miniatura, gobernado con el máximo cuidado por una mujer y no por un hombre. Cada miembro tenía unos deberes específicos que cumplir y debía atenerse a unas reglas a menudo más estrictas y severas que las de un convento». <<
[68] La selección de libros que leerá el monstruo está hecha con un cuidado exquisito. Cada título está pensado para nutrir un aspecto determinado de la personalidad de la criatura. El Werther, del poeta alemán Johann W. Goethe (1749-1832), le enseñará sobre el amor; Las vidas paralelas de Plutarco, historiador griego (50-125), le abrirán los ojos a las responsabilidades cívicas, y El paraíso perdido, de Milton, le ofrecerá una justificación de los designios de Dios para con los hombres. <<
[69] La técnica de Plutarco de presentar paralelamente la vida de un griego y un romano eminentes es de interés en Frankenstein, ya que M. Shelley también presenta a sus protagonistas en grupos paralelos: Robert Walton y Víctor Frankenstein, Víctor Frankenstein y Henry Clerval. Víctor Frankenstein y la criatura, Justine y Elizabeth. <<
[70] Los cinco personajes se incluyen en Las vidas paralelas de Plutarco. Numa Pompilio fue el segundo rey legendario de Roma, que gobernó durante los años 714-617 a. C., distribuyendo la tierra entre el pueblo. Solón, uno de los siete sabios de Grecia, es famoso por reducir los impuestos de los atenienses más pobres. Licurgo era un jurisconsulto espartano del siglo IX a. C. De Plutarco ha aprendido la criatura a admirar a los jurisconsultos con preferencia sobre Rómulo y Teseo, y la razón es evidente. Rómulo, además de fundador de Roma, fue el instigador del rapto de las Sabinas; en cuanto a Teseo, parece que, aparte de matar al Minotauro, consiguió una respetable fama como violador. <<
[71] Entre otras, la tomada de El paraíso perdido como epígrafe a Frankenstein. <<
[72] En cierto sentido, la criatura por fin ha llegado al fondo de sí misma. Esta extraña danza a la luz de la luna con la antorcha tiene todo el aspecto formal de un atisbo de iniciación a una religión aún desconocida. Al sacrificar la casa, la criatura abandona la posibilidad de creer en el Dios de De Lacey y se acepta a sí mismo como un ser de la naturaleza primordial, cruel, atávico. <<
[73] Ante la pregunta de por qué, si Víctor es el brillante científico que se nos ha presentado, no remodela las horrendas facciones de la criatura, hay una respuesta clara: la fealdad de la criatura es la base psicológica sobre la que descansa la obra. En primer lugar, es la metáfora para el aislamiento de la criatura, y, en segundo lugar, es una pista sobre el origen de sus desgracias: nació en «un laboratorio de repulsiva creación». <<
[74] De nuevo observamos que, salvo interjecciones corrientes que incluyan el vocablo Dios, los juramentos serios se hacen en nombre de aspectos del mundo natural, como si Mary Shelley quisiera encuadrar constantemente a sus personajes dentro del marco panteista. <<
[75] En la edición de 1831 Mary Shelley, para evitar precisamente la sugerencia de una relación incestuosa entre Víctor y Elizabeth, convirtió a Elizabeth en una expósita, encontrada por la madre de Víctor. <<
[76] Nos encontramos aquí con la afirmación más clara de la relación entre el creador y su criatura. Hay varios otros ejemplos de intercambio de los papeles de esclavo-amo entre Víctor y el monstruo. <<
[77] Se dirige a Walton que recordaremos está escuchando el relato de Víctor. <<
[78] Anécdota que Mary Shelley oyó contar durante su viaje al Rin en 1814, y que recoge en su History of a Six Weeks' Tour (Historia de una excursión de seis semanas). <<
[79] Nueva denominación de país a lo que actualmente son cantones. <<
[80] Frase tomada del poema The Stary of Rimini (La historia de Rímini) del inglés Leight Hunt (1784-1859), buen amigo de los Shelley. <<
[81] Tomado del poema del inglés W. Wordsworth (1770-1850) «Lines Composed a Few Miles Above Tintern Abbey». <<
[82] Punto estratégico de la batalla entre los ingleses y la Armada Invencible en 1588. <<
[83] Gravesend, ciudad inglesa en el estuario del Támesis. Woolwich Greenwich, pueblecitos cercanos a Londres. Por este último pasa el meridiano 0, a partir del cual se cuentan los husos horarios y se mide la longitud de las coordenadas geográficas. <<
[84] Conocida prisión y lugar de ejecución en la historia de Inglaterra. <<
[85] Hemos visto cómo la criatura y Víctor son aspectos uno del otro. Ahora Clerval se nos ofrece como parte de la ecuación psicológica. Para M. Shelley, Clerval representa el lado más amable, menos diabólico, de Víctor. <<
[86] En el capítulo anterior se nos ha dicho: «Era una límpida mañana, de finales de diciembre, cuando vi por primera vez los blancos acantilados de Gran Bretaña». El lector deberá decidir con cuál de las dos fechas quiere quedarse. <<
[87] Errata por Goring; lord George Goring (1583-1663), estadista inglés al servicio de Carlos I. <<
[88] Así se denomina al río Támesis a su paso por Oxford. <<
[89] Ya en el volumen I se nos ha preparado para esto, cuando Víctor vio cómo un relámpago destruyó el magnífico roble. Entonces se nos dijo que fue un suceso que llevó directamente a su posterior interés por la ciencia. <<
[90] Condados ingleses, cerca de la frontera oeste con Escocia, conocidos como el Distrito de los Lagos, donde vivieron o escribieron los poetas románticos ingleses llamados «laquistas»: W. Wordsworth, S. T. Coleridge y R. Southey. <<
[91] Pequeño grupo de islas en la costa norte de Escocia. <<
[92] Pueblecito en la orilla sur del lago Ginebra. <<
[93] Sorprende el hecho de que Víctor, que hasta ahora no había confiado su historia a nadie por temor a que se le considerara demente, acuda con ella al magistrado. Quizá la locura en la que ha desembocado su enfermedad le haya hecho perder el miedo a esa palabra. <<
[94] La palabra furia se refiere aquí específicamente a las tres Euménides, encargadas, según la mitología clásica, de vengar los crímenes que no se castigaban. <<
[95] No se debe pasar por alto la importancia de este momento. La criatura se ríe, demostrando así que ha oído el juramento de venganza de Víctor, y esta risotada le salva la vida a Víctor, pues le indica que su reto ha sido aceptado. <<
[96] Referencia al momento cumbre de la famosa retirada de los Diez Mil desde Persia a Grecia descrita por el historiador y filósofo griego Jenofonte (435-355 a. C.) en su Anábasis. <<
[97] Aquí termina la narración de Víctor Frankenstein, que, inserta en la Carta 4 de Robert Walton a su hermana, ha incluido la de la criatura creada. Robert Walton reanuda la carta, si bien a partir de este momento toma forma de entradas en su diario. <<
[98] Aunque desde el principio de la narración parece claro que M. Shelley quiso vincular a Walton y a Víctor temáticamente, sólo en este momento se puede decir que sus vidas son en verdad parecidas. Walton, como vemos, es tan responsable del destino de su tripulación como Víctor del de su criatura. <<
[99] Errata en el original por 9 de septiembre. <<
[100] Al igual que Víctor, la criatura quiere ser culpable. Víctor no fue asesinado; murió de muerte natural provocada por su propia decisión de continuar la venganza. <<