Agradecimientos

Quiero agradecer el gran talento y disponibilidad que tantas personas pusieron a mi servicio para lograr que esta novela fuera una realidad.

Al Señor Leo Seguín de la universidad nacional de San Luis por sus aportaciones en cuanto a biología molecular.

Gracias a Juan Carlos Cano por sus aportaciones en lo relativo a restauración de motos clásicas. Un mundo apasionante que él logró transmitirme.

Al portavoz de la Policía Foral de Navarra, el subinspector Mikel Santamaría, por su paciencia al contestar mis preguntas.

Al museo etnográfico Jorge Oteiza de Baztán que me facilitó originalmente la información necesaria para comenzar.

A mi agente Anna Soler-Pont, por conseguirlo.

Gracias a Mari, por renunciar a su retiro y hacerme el honor de manifestarse en esta tormenta que me tiene a su merced desde que comencé a escribir la trilogía del Baztán.