por Ed Greenwood
Ah, los drows! Dedos finos, tan negros como la oscuridad que rodea toda la escena y que sostienen una elegante copa de cristal con un vino de color encendido. Labios crueles y mentes rápidas y mortíferas que no se deben tomar a la ligera…
Los veteranos de los juegos recuerdan perfectamente esa pequeña sorpresa al final de los módulos de los Gigantes, ese vínculo que los convirtió en la primera parte de lo que sería la primera aventura épica publicada para el juego ADVANCED DUNGEONS & DRAGONS®. Esas aventuras enfrentaron por primera vez cara a cara (y espada contra espada) a intrépidos aventureros con los siniestros y letales drows.
Los ágiles, hermosos e implacables elfos oscuros fueron las criaturas más fascinantes creadas por Gary Gigax. Puede decirse que cualquier persona que hiciera de Dungeon Master™ o se zambullera en los módulos «D» quería más: más del extraño mundo de la Antípoda Oscura, con sus elfos de piel del color de la obsidiana, sus hongos y sus misteriosas radiaciones y carromatos arrastrados por lagartos. Éste es el escenario en el que los drows disparan dardos con sus ballestas de mano y lanzan jabalinas con sus atlatals, mientras que en la retaguardia las crueles sacerdotisas agitan sus látigos y sisean órdenes en la aterciopelada oscuridad.
The Vault of the Drow fue nuestra primera ciudad subterránea, y los jugadores quedaron absolutamente fascinados por sus clanes de mercaderes rivales y casas drows. Al enfrentarnos con ellos conocimos a auténticos villanos mortales, todos al servicio de la siniestra diosa araña Lloth (o si lo preferís Lolth), que había tejido un reino con hilos de araña en el que se abrían puertas a otros planos o mundos, a través de las cuales se podía invocar a las yochlol. Un mundo mortal y sin embargo atractivo.
Una de las personas que respondieron a su seductora y siniestra llamada fue Bob Salvatore. Fue él quien creó en letra impresa los drows, ofreciéndonos el heroísmo de Zaknafein Do’Urden y su famoso hijo Drizzt. Dejando de lado a la reina araña, Drizzt es sin duda el elfo oscuro más conocido e importante, no sólo entre los habitantes de la superficie de REINOS OLVIDADOS, sino también en todos los juegos de fantasía. Del mismo modo que las aventuras en las que aparecieron los drows se han convertido en clásicos, el mismo Drizzt es un personaje clásico, noble y mortífero, atormentado pero triunfante, que podría sobrevivirnos a todos.
En más de una ocasión, he tenido el honor de redactar reglas de juego y descripciones de los elfos oscuros, pero fue Bob quien en su novela La morada nos dio Menzoberranzan con toda su decadencia, salvajes intrigas y oscuro esplendor. Fue Bob quien nos presentó a un elfo oscuro que abandonaba esa tenebrosa ciudad para realizar tareas más grandes y brillantes. Los lectores encuentran inspiración en estas sagas, y es un placer para mí presentar estos clásicos de la fantasía épica. Mientras me recuesto en el respaldo de la silla noto la mirada aprobadora de Elminster a mi espalda y envidio a los afortunados que se disponen a conocer a Drizzt por primera vez: les espera algo muy emocionante. Por mi parte, me alegro de que Bob trajera a Drizzt a mi mundo, a los Reinos que ahora compartimos todos y digo de nuevo a mi viejo amigo: ¡Bien hecho, contador de historias!