[1] ‘de su declinación, declive’.<<
[2] melancolía: modernamente, se hablaría de una ‘depresión’.<<
[3] Jacopo Sannazaro (1458-1530), autor de La Arcadia (1485) y de varias églogas en latín.<<
[4] Los nombres aluden, respectivamente, al color del pelo ‘entre blanco y canela’ y ‘leonado’.<<
[5] Quintanar de la Orden, en la actual provincia de Ciudad Real, próximo a El Toboso.<<
[6] ‘tenebrosas’.<<
[7] ‘para compensarlo’.<<
[8] ‘Felicitadme’.<<
[9] Hasta aquí no se había dado el nombre de pila de don Quijote, ni el apellido había aparecido en la forma Quijano. Avellaneda lo llama «el señor Martín Quijada».<<
[10] ‘no ha de gastar uno bromas con su salvación eterna’.<<
[11] ‘tan bien concertadas’.<<
[12] ‘gestos para contener el llanto’.<<
[13] ‘disposiciones testamentarias de últimas voluntades’. En la cabeza o ‘encabezamiento’ solían hacerse unas consideraciones del tipo de las que se leen en las primeras líneas de este mismo capítulo.<<
[14] Término usado para distinguir las secciones de un documento.<<
[15] Parte importante en los testamentos de antaño era dejar saldadas o recompensadas las deudas con los servidores.<<
[16] ‘de la mejor manera imaginable’.<<
[17] ‘por haberle puesto mal la cincha’, es decir, ‘la correa que sujeta la silla al caballo’.<<
[18] ‘los tiempos han cambiado’.<<
[19] ‘en bloque, sin necesidad de enumeración detallada’.<<
[20] Antonia era hija de una hermana de don Quijote (II, 6) pero el apellido era entonces de elección poco menos que libre y se dejaba usar a conveniencia en género masculino o femenino.<<
[21] ‘de lo que sea más fácil de separar, de disponer’.<<
[22] ‘se haya investigado, de manera que se averigüe de forma fehaciente’.<<
[23] ‘todo lo que le he dejado en herencia’.<<
[24] ‘cuan largo era’.<<
[25] ‘el último fin’.<<
[26] ‘de muerte natural’, no violenta.<<
[27] Esmirna, Rodas, Colofón, Salamina, Quíos, Argos y Atenas afirmaban ser la patria de Homero.<<
[28] nuevos por referencia a los epitafios de los académicos de Argamasilla con que termina la Primera parte.<<
[29] de su vida: ‘sobre su vida’.<<
[30] ‘fue prueba de su buena suerte’.<<
[31] Propiamente, ‘tabla con ganchos en la que se cuelgan los utensilios de la cocina’.<<
[32] ‘pluma de ave para escribir’, que debe afilarse (tajarse) a medida que se usa.<<
[33] ‘¡Cuidado, ojo…!’.<<
[34] Los dos últimos versos pertenecen a un romance del cerco de Granada, aducido ya en el capítulo 22 de la Segunda parte.<<
[35] ‘de punta gruesa, mal perfilada’.<<
[36] resfriado: ‘frío, desangelado’.<<
[37] ‘de la sepultura’.<<
[38] Avellaneda aludía a una posible continuación de las aventuras del héroe en Castilla la Vieja «llamándose el Caballero de los Trabajos, los cuales no faltará mejor pluma que los celebre».<<
[39] las dos jornadas que suponen las dos partes del Quijote auténtico.<<
[40] ‘con lo que pide la fe cristiana’. Quien habla ahora es el autor, y no ya la pluma, aunque todavía dirigiéndose al mismo lector indeterminado.<<
[41] ‘Adiós, que estés bien’, fórmula latina de despedida.<<