[1] ‘tiras de oro retorcidas que se fijaban con hilos de seda al emblema (empresa) del bordado’.<<
[2] ‘limpiando o cribando’.<<
[3] De los tres, el rubión es el trigo de peor calidad.<<
[4] En señal de respeto, como se hacía con las cartas del Rey o del Papa.<<
[5] ‘en lo más intenso del meneo’.<<
[6] ‘no se te olvide ni un detalle’.<<
[7] ‘más de lo que mide un puño’.<<
[8] ‘un olor como a incienso de Sabá’.<<
[9] Se solían perfumar las pieles con que se confeccionaban los guantes.<<
[10] ‘pringosa’.<<
[11] ‘acatarrado’.<<
[12] ‘como recompensa’.<<
[13] ‘lo bueno siempre es bueno, aunque llegue a deshora’; mangas: ‘propinas’ o ‘prendas nuevas’.<<
[14] ‘monstruo repugnante’.<<
[15] ‘cuando menos lo espero’.<<
[16] Los gitanos ponían unas gotas de mercurio (azogue) en las orejas de las caballerías que querían vender, para que parecieran más vivaces.<<
[17] ‘acerca de’.<<
[18] ‘qué mal está vuestra merced de la cabeza’.<<
[19] «que ciento volando», se dice actualmente.<<
[20] Refrán que Sancho deforma cómicamente: «quien bien tiene y mal escoge, por mal que le venga no se enoje».<<
[21] ‘oportunidad’.<<
[22] ‘de propina, de beneficio extra’.<<
[23] ‘hacia la costa’.<<
[24] ‘no le pillase en alguna mentira’.<<
[25] ‘aunque’.<<
[26] ‘se agenció, consiguió’.<<
[27] En la aventura relatada en el capítulo 4.<<
[28] ‘no sé qué discursos’.<<
[29] ‘perfumados’, es decir, ‘mejorados’.<<
[30] ‘salió del bosque’.<<
[31] ‘me decía un chiste y mofa con la finalidad de hacer burla de vuestra merced’.<<
[32] ‘me dejó en tal estado’.<<
[33] ‘sin venir al caso’.<<
[34] ‘la tormenta’, es decir, ‘la cólera’.<<
[35] ‘que no saca provecho en guardarla’.<<
[36] Se refiere a la ballena de Jonás, el profeta que intentó eludir el mandato divino.<<
[37] ‘que le pusiese el cabezal, las riendas y el bocado’.<<
[38] ‘y emprendió el camino’.<<
[39] ‘muy avergonzado’.<<