Las canciones citadas en este libro figuran atribuidas al cantante (o cantantes, o grupo) más comúnmente relacionados con ellas. Tal vez ofenda esto al purista, que considera que la letra de una canción pertenece más al autor que al cantante. Lo que usted ha hecho, podría alegar el purista, es como adscribir las obras de Mark Twain a Hal Holbrook. No estoy de acuerdo. En el mundo de la canción popular, es como dicen los Rolling Stones: el cantante, no la canción. Y les doy las gracias a todos ellos, muy especialmente a Chuck Berry, Bruce Springsteen, Brian Wilson… y Jean Berry, de Jan and Dean. Él sí venía de la Curva del Muerto.
Obtener el permiso legal necesario para utilizar letras de canciones no es tarea fácil, y quisiera manifestar mi agradecimiento a algunas de las personas que me ayudaron a recordar las canciones y me aseguraron luego que no había ningún inconveniente en utilizarlas. Figuran entre ellas: Dave Marsh, crítico e historiador de rock; James Feury, que mece en sus ritmos a mi pequeña ciudad a través de WACZ; su hermano Pat Feury, que organiza festivales en Portland; Debbie Geller; Patricia Dunning y Pete Batchelder. Gracias a todos, muchachos, y que vuestros viejos discos de los Coasters nunca se comben tanto que no podáis ponerlos.
S. K.