DICCIONARIO DE TÓPICOS
por Geoffrey Braithwaite
ACHILLE
El hermano mayor de Gustave. Un hombre de aspecto taciturno, y largas barbas. Heredó su empleo y su nombre propio de su padre. Gracias a que Achille cargó con las expectativas familiares, Gustave quedó libre para entregarse al arte. Murió de un reblandecimiento del cerebro.
BOUILHET, LOUIS
La conciencia literaria de Gustave, y también su comadrona, su brújula, su testículo izquierdo, su doble. Su segundo nombre era Hyacinthe. Ese Doppelgänger de menor éxito que suelen necesitar todos los grandes hombres. Citar con leve desaprobación su galante observación ante una muchacha tímida: «Cuando se tiene el pecho plano, el corazón está más cerca.»
CARTAS
Imite a Gide, y diga que las cartas de Flaubert son una obra maestra. Imite a Sartre, y diga que constituyen un ejemplo perfecto de libre asociación desde un diván pre-freudiano. Luego, hágale caso a su propio olfato.
DU CAMP, MAXIME
Fotógrafo, viajero, ambicioso, historiador de París, académico. Escribía con plumilla de acero, mientras que Gustave siempre usaba plumas de ave. Hizo de censor de Madame Bovary para la Revue de Paris. Si Bouilhet es el alter ego literario de Gustave, Du Camp es su alter ego social. Después de haber mencionado en sus memorias la epilepsia de Gustave, se convirtió en proscrito del mundo literario.
EPILEPSIA
Estratagema que permitió a Flaubert el escritor sortear una carrera convencional, y a Flaubert el hombre sortear la vida. Lo importante es averiguar en qué nivel psicológico concibió esta táctica. ¿Eran sus síntomas un simple, aunque intenso, fenómeno psicosomático? Si se hubiese tratado sencillamente de epilepsia resultaría excesivamente trivial.
FLAUBERT, GUSTAVE
El ermitaño de Croisset. El primer novelista moderno. El padre del realismo. El verdugo del Romanticismo. El puente que une a Balzac con Joyce. Precursor de Proust. El oso en su guarida. El burgués burguesófobo. En Egipto, «el padre del Bigote», San Policarpo; Cruchard; Quarafon; le Vicaire-Général; el Alcalde; el viejo Seigneur; el Idiota de los Salones. Todos estos títulos fueron adquiridos por un hombre que se mostraba indiferente a los tratamientos honoríficos. «Los honores deshonran; el título degrada; el cargo embrutece.»
GONCOURT, LOS HERMANOS
Recordar lo que los hermanos Goncourt dijeron de Flaubert: «Aunque sea muy franco por naturaleza, jamás es completamente sincero en lo que dice sentir, sufrir o amar.» Recordar luego lo que todo el mundo opina de los Goncourt: aquellos hermanos tan envidiosos, tan poco dignos de confianza. Recordar también lo poco dignos de confianza que fueron Du Camp, Louise Colet, la sobrina de Flaubert, el propio Flaubert. Preguntar luego, en tono violento, ¿es que no hay modo de conocer a nadie?
HERBERT, JULIET
«Miss Juliet.» La ética de las institutrices inglesas que trabajaban en el extranjero a mitad del siglo XIX no ha recibido todavía la atención académica que merece.
IRONÍA
El modo moderno: marca del diablo, o tubo respiratorio de la cordura. La narrativa de Flaubert plantea esta cuestión: ¿Impide la ironía que brote la simpatía? En su diccionario no aparece el término ironie. Quizá esta omisión tenga pretensiones irónicas.
JEAN-PAUL SARTRE
Se pasó diez años escribiendo L’Idiot de la famille en lugar de escribir panfletos maoístas. Es como una Louise Colet de altos vuelos, que malgastó el tiempo importunando a Gustave, que lo único que quería era que le dejasen en paz. Concluir de todo ello: «Más vale malograr la ancianidad que no saber qué hacer con ella.»
KUCHUCK HANEM
Una prueba de pH. Gustave tuvo que elegir entre la cortesana egipcia y la poetisa parisiense: chinches, aceite de sándalo, monte de venus afeitado, clitoridectomía y sífilis, por un lado, o limpieza, poesía lírica, fidelidad sexual relativa y derechos de la mujer por el otro. Para él, la balanza estaba muy equilibrada.
LOUISE COLET
a) Tediosa, molesta, promiscua, carente de talento propio y de capacidad de comprensión para la genialidad de los demás. Intentó cazar a Gustave y casarse con él. ¡Imagínese a los niños berreando por todas partes! ¡Imagínese la desdicha de Gustave! ¡Imagínese la felicidad de Gustave!
b) Valiente, apasionada, profundamente incomprendida, crucificada por el amor que le inspiró Flaubert, un hombre cruel, intratable, provinciano. Tenía la razón de su parte cuando se quejó de que «Gustave sólo escribe de Arte, o de sí mismo». Protofeminista que cometió el pecado de tratar de hacer feliz a un hombre.
MME. FLAUBERT
Carcelera de Gustave, pero también su confidente, enfermera, paciente, banquera y crítica. «Tu pasión por las frases te ha secado el corazón», le dijo una vez. A él le pareció que esta observación era «sublime». Cf. George Sand.
NORMANDÍA
Siempre húmeda. Habitada por un pueblo taimado, orgulloso, taciturno. Incline la cabeza a un lado y diga: «Naturalmente no debemos olvidar nunca que Flaubert era de Normandía.»
ORIENTE
El crucero desde el que fue disparada Madame Bovary. Flaubert partió de Europa siendo un romántico y regresó de Oriente convertido en un Realista. Cf. Kuchuk Hanem.
PROSTITUTAS
Necesarias en el siglo XIX para contraer la sífilis, enfermedad sin la cual nadie podía afirmar que era un genio. Entre otros portadores de la Roja Enseña del Valor destacan Flaubert, Daudet, Maupassant, Jules de Goncourt, Baudelaire, etc. ¿Hubo algún escritor que no la padeciese? Si lo hubo, seguramente era homosexual.
QUIJOTE, DON
¿Fue Gustave un Viejo Romántico? Sentía verdadera pasión por aquel caballero soñador al que una sociedad vulgar y materialista forzó a andar sin rumbo por el mundo. «Madame Bovary, c’est moi» es una alusión a la respuesta que dio Cervantes cuando en su lecho de muerte le preguntaron por el origen de su famoso personaje. Cf. Travestismo.
REALISMO
¿Fue Gustave un Nuevo Realista? Públicamente, siempre rechazó esa etiqueta: «Emprendí esta novela porque odiaba el realismo.» Galileo negó en público que la Tierra girase alrededor del Sol.
SAND, GEORGE
Optimista, socialista, humanitaria. Menospreciada hasta que la conoció en persona; luego, adorada. La segunda madre de Gustave. Después de una estancia en Croisset le envió a Gustave sus obras completas (en la edición de 77 volúmenes).
TRAVESTISMO
Gustave en su primera madurez: «Hay días en los que…, quisiera ser mujer.» Gustave en su madurez: «Madame Bovary, c’est moi.» Cuando uno de sus médicos le dijo que era «una vieja histérica», comentó que esta observación le parecía «profunda».
USA
Son escasísimas las referencias de Flaubert al País de la Libertad. Acerca del futuro escribió: «Será utilitario, militarista, Americano y católico. Muy católico.» Probablemente le gustaba más el Capitolio que el Vaticano.
VOLTAIRE
¿Qué pensaba el gran escéptico del siglo XIX del gran escéptico del siglo XVIII? ¿Fue Flaubert para su época como Voltaite para la suya? ¿Fue Voltaire para su época lo mismo que Flaubert para la suya? «Histoire de l’esprit humain, histoire de la sottise humaine.» ¿Cuál de los dos lo dijo?
XILOFÓN
No tenemos pruebas de que Flaubert oyera sonar alguna vez un xilofón. Saint-Saëns utilizó este instrumento en su Danse Macabre (1874) para insinuar el sonido del entrechocar de huesos; esto hubiese divertido seguramente a Gustave. Quizá escuchó el glockenspiel en Suiza.
YVETOT
«Ver Yvetot y morir.» Si alguien pregunta por el origen de este epigrama tan poco conocido, sonría misteriosamente y permanezca en silencio.
ZOLA, EMILE
¿Debemos responsabilizar a los grandes escritores de lo que hagan sus discípulos? ¿Quién elige a quién? Cuando alguien dice de ti que eres el Maestro, ¿puedes despreciar su obra? Por otro lado, ¿son sinceras esas alabanzas? ¿Quién necesita más de quién, el discípulo al maestro o el maestro al discípulo? Debatir la cuestión sin llegar a sacar conclusiones.