¡Qué enormes le parecerán
las cosas pequeñas a la menuda mosca!
Un botón de rosa como un colchón de plumas,
su espina como una lanza;
una gota de rocío como un espejo;
un cabello como un alambre dorado;
la más breve semilla de mostaza
tan feroz como carbones encendidos;
una pieza de pan, un encumbrado cerro;
una avispa, un cruel leopardo;
y verá brillar las pizcas de sal
como el pastor los corderos.
Walter de la Mare, “La mosca”
(Trad. Bárbara Jacobs)