A la postre mi fe y confianza crecieron en este proceso y comencé a ir de lo mínimo a prosperar. Empecé a pedir lo que quería en mi hoja de cálculo y logré que sucediera. Ahora empiezo a soñar con vivir la mitad del tiempo en Francia. ¡Recuerdo hace un año, cuando comenté que iría a París y tuve que usar todo el saldo de mi tarjeta de crédito! Fui, me divertí y el dinero llegó poco después. Otra cuestión que aprendí es que si uno se espera a vivir su vida hasta que tenga suficiente dinero o lo que sea (llena el espacio), eso no llegará y siempre lo estará esperando. Conducirse "como si..." es algo que hice cuando temía hacer algo, pero sabía que era bueno para mí, como hablar en público. Procedería como si no tuviera miedo y después actuaría. Es lo mismo con el dinero. Compórtese como si ya tuviera el dinero y haga los planes precisos como si ya estuviera en su cuenta bancaria. El acto de acercarse a sus sueños hace que estos se acerquen a usted. Cuando soñé ir a París el año pasado, pensé que debía tener todo el dinero ahorrado antes de reservar el vuelo. Después recordé este principio; tenía suficiente para el boleto de avión, así que lo compré, ¡y luego recibí un cheque en el correo de un bien inmueble que había vendido cinco años atrás! ¡Fue suficiente para estar tres semanas en París! Pero en realidad quería quedarme por cuatro meses, así que llené todos los papeles para obtener una visa de cuatro meses. Fue mucho papeleo pero me la dieron, de modo que estaba preparada para quedarme solo en caso de que algo surgiera, ¡y así fue! Muchas cosas sucedieron y terminé extendiendo mi viaje tres veces mientras estaba allá. En fin, escribo esto para mostrarle que es preciso actuar para acercarse a sus sueños a fin de conseguirlos, no solo desear y esperar. |