No, no todas las llamadas; pero las suficientes. He usado el teléfono para vender millones de dólares de inscripciones a mi taller en los últimos veintitantos años.

Quizás esté poniendo sus ojos en blanco, y es probable que piense que lo último que quiere hacer es volverse una vendedora telefónica. ¿Pero qué tal si solo llama para hacer una amiga? Luego, si muestran interés en lo que hace, puede dar el siguiente paso y abundar en el tema.

Lo sé. Quiere que toda la publicidad que haga funcione y que la gente simplemente se disponga a comprar sin tener que hablar con usted. Quiere que den clic en el botón Comprar de su sitio web. Quiere que la gente la llame y le diga que quiere adquirir su producto o servicio.

Esa estrategia funcionará para unas cuantas ventas pequeñas, pero para las compras importantes, los clientes potenciales y reales querrán hablar con usted, saber que entiende quiénes son, de dónde vienen y qué buscan; tener conocimiento de que ha trabajado antes con alguien de la misma industria en la que ellos están o con quien tiene sus mismos problemas; saber que no es una estafadora que trata de sacarles dinero y dejarlos sin nada al final del proceso. Necesitan que los guíe a través del proceso de compra, porque la mercadotecnia no cierra la venta.

La gente ve sus anuncios, correos electrónicos, comentarios, etc., pero casi no se detienen a leerlos. Cuando lo hacen (lo cual puede tomar meses o años), en definitiva se interesarán en su trabajo, amarán su contenido y querrán más; pero, quizás también solo esperan todas las muestras gratis y nunca compran nada. ¿Le suena familiar?

"¡El dinero está en el teléfono!"

He dicho eso durante años; sé que tengo algunos contenidos que en verdad son buenos, y mucha gente me ha dicho que mi boletín por correo electrónico es el único al que siguen suscribiéndose. Los libros han sido maravillosos para publicitar mi trabajo (un agente de seguros que conocí en Facebook me dijo que leyó una página al día de The Wealthy Spirit por ocho años). Es increíble tener fans que leen sus artículos, boletines, comentarios en redes sociales, anuncios y libros.