Introducción

La forma de hacer negocios de las mujeres: Ganar dinero, hacer el bien y divertirse

¿Cree usted que trabaja demasiado para pagar a su casero, su tarjeta de crédito y al gobierno, y que nunca le queda suficiente para sí misma?

¿Sueña con tener más ingresos, más dinero en el banco y más tiempo para viajar?

¿Sus mejores amigos son sus aparatos eléctricos?

¿Otras personas cuidan de sus hijos?

¿Es un milagro si consigue que le den un masaje?

No está sola. A muchas mujeres que conozco les encanta ayudar y servir a los demás, pero con demasiada frecuencia dejan fuera de la ecuación su propio bienestar, no cobran lo suficiente por sus servicios y dan gratis demasiadas cosas. No les gusta vender porque se desilusionaron de las numerosas tácticas de "venta dura" y no quieren hacer esto. No cuentan su dinero porque nadie les enseñó que los estados financieros pueden ayudarles a crecer, y porque, de todas maneras, el dinero no es su principal objetivo. Trabajan demasiado en multitud de tareas y no se dan tiempo suficiente para cuidar de sí mismas.

Psicológicamente, se necesita una enorme fuerza de carácter para enfrentar el miedo a la inseguridad financiera con el que vivimos la mayoría de las mujeres. En un artículo publicado en Los Angeles Times en marzo de 2013, Walter Hamilton señaló que "casi la mitad de las estadounidenses temen acabar como vagabundas, incluso muchas de quienes ganan un salario de seis dígitos". Aunque 6 de cada 10 mujeres estadounidenses dijeron ser el principal sostén de su hogar y 54% de ellas mencionaron que manejaban las finanzas domésticas, 49% de las entrevistadas temían verse convertidas en indigentes, de acuerdo con una encuesta de Allianz Life Insurance Company of North America.