[15]

Ya de su creación, tal vez, alhaja
algún sereno aparte campesino
el algarrobo, el haya, el roble, el pino
que ha de dar la madera de mi caja.

Ya, tal vez, la combate y la trabaja
el leñador del ímpetu asesino,
y, tal vez, por la cuesta del camino,
dando un olor a vida, muerta baja.

Ya, tal vez, la reduce a geometría:
rectas, planos, la mano que le apresta
el último zapato a todo vivo.

Y cierta, sin tal vez, la tierra umbría
desde la eternidad está dispuesta
a recibir mi adiós definitivo.