En cuanto a la fijación del texto me atengo a los siguientes criterios. Para el de EL RAYO QUE NO CESA, doy absoluta preferencia a la primera edición publicada por Manuel Altolaguirre en la colección Héroe. El silbo vulnerado, que pasó por varias versiones, lo he reproducido según el texto de J. M. de Cossío en su edición de 1949, corrigiendo sólo (tras comparar las versiones de L. de Luis y de A. Sánchez Vidal) obvias erratas o fallos de puntuación. Para los poemas de El Gallo Crisis, su impresión en esta revista la considero definitiva. Otras variantes que utilizan D. Puccini, A. Sánchez Vidal, L. de Luis y J. Urrutia, las tengo en cuenta en ciertas ocasiones como ayuda a alguna interpretación. El texto que ofrezco coincide en general con el de A. Sánchez Vidal en Poesías Completas excepto la interpretación de unas pocas erratas o signos de puntuación que no me han parecido convincentes. Los poemas de El silbo aparecen numerados con paréntesis cuadrados, los de EL RAYO con simples números.