Mójame los labios con whisky
Fred y abre las puertas
para bromear-mientras
las mujeres esperaban
y Bert Lahr esperaba
tocando lo que le apetecía
como Duke Ellington
solía sentarse con la mirada fija en Seymour
y me empujaba a bailar
con la música por su
grave estallido
elevada estabilidad
hombros,
tetas,
¿y qué cómo quién?
1959