DEPORTES

El deporte en general ocupa muchas páginas diarias de la prensa nacional, de la radio y de la televisión. Los lectores —en su mayoría, sobre todo los lunes— van directamente a las páginas deportivas para ver clasificaciones, leer opiniones y confirmar si el penalty fue justo o no lo fue.

Naturalmente que el deporte es un vivero de gazapos. Los mismos entrenadores o presidentes de clubs cometen equivocaciones, o aquel delantero centro que, solo ante la puerta vacía, tira el balón a las nubes.

Pero ya se imaginarán que aquí vamos a exhibir gazapos tipográficos, sin preocuparnos de técnicas ni tácticas.

Empezamos, por ejemplo, con la reseña de un partido internacional de fútbol, España-Dinamarca, donde se comenta que nuestra selección jugó muy mal en líneas generales y agrega: «El guardameta Larsen, del equipo danés, se compadeció de nuestros once representantes, cuando a tan sólo cuatro minutos del descanso propició, con un falo monumental, el primer gol de Pirri.»

Hasta la pornografía ha llegado al deporte.

En un diario gallego comentaban que «la pasada jornada quinielística había proporcionado once millones y un buen pico a Basilio López» y «quince millones y un buen pito a Rafael Adamuz».

Será que le hacía falta.

En Chile se produjo un accidente aéreo donde murieron los componentes de un equipo de fútbol y decía un periódico deportivo: «En el grupo deportivo figuraban quince futbolistas, tres directivos y cuatro señores.»

Los futbolistas y los directivos debían ser señoras.

«Efectuado anoche el sorteo para la próxima eliminatoria de la Copa del Rey, el Sabadell se enfrentará al presidente Nasser.»

Esto decía un diario de Bilbao, pero luego no se confirmó, porque el presidente Nasser se negó a jugar, como era de suponer.

Al comenzar una nueva temporada, en un diario de Santa Cruz de la Palma se daba ánimos al equipo local y decían: «El corazón por parte de los jugadores, pero también por los aficionados. Por todos sin distinciones ni cortapichas, porque la empresa no es fácil.»

Lo de las distinciones nos parece muy bien, pero lo otro…

En la disputa del título mundial de los pesos pesados de boxeo hubo sus más y sus menos entre la Comisión Atlética de Nueva York y el Consejo Mundial de Boxeo Profesional, y al hablar de ello en un diario de Madrid, lo publicaron con este titular tan claro: «El C.M.B.P. apoya la postura del W.B.A. frente a la C.A.N.Y.»

Para el lector medio era toda una noticia.

Un cronista deportivo comentaba un partido que jugó el Athletic de Bilbao en Las Palmas, donde empató, y escribió esta histórica frase: «… Y el Athletic llegó a la ciudad canaria: vio, jugó y empató… Como Nabucodonosor.»

Y se quedó tan ancho.

Si lo hubieran hecho a propósito no les sale mejor, porque en el pueblo de Marquina imprimieron unas octavillas anunciando unas fiestas, y en ellas se leía: «A las 4.30 y 10.30 se jugarán extraordinarios paridos de pelota a cesta puta.»

Queriendo animar al público ante un partido trascendental para el Athletic de Bilbao, decía un cronista local: «Hay que animar. El público de San Mamés siempre ha sido deportivo, pero no olvidemos la histórica frase de Trastámara: ni quito ni pongo rey, pero ayudo a mi señor.»

Y escrito esto, descansó.

Allá por el año 1955, el Barcelona, en partido de Copa, goleó 5-0 al Málaga, y en una revista deportiva de Zaragoza se ofrecía un resumen de lo que fueron los goles. Relataba los dos primeros y seguía: «A los 30 minutos, Kubala se tiró un pedo y marcó el tercero.»

Uno, que no estuvo en el partido, lo duda, pero la verdad es que Kubala era capaz de todo.

Tampoco está mal éste: «Magnífico el gol de Uriarte, que puso al público los pelos de puta.»

En un frontón vizcaíno que estuvo cerrado por reformas, anunciaron su reapertura y así leemos: «Ha quedado magnífico en sus instalaciones. Por cierto que nos anuncian que además de los habituales partidos de pala, habrá otros de pala. Magnífico, sí, señor.»

Y tan magnífico, porque en la variación está el gusto.

Un diario deportivo de Madrid publicaba reseña de un partido que ganó con facilidad el Atlético en el Calderón, y al hablar de las incidencias comenta que «el meta Miguel fue sustituido porque recibió un cabezazo en la muñeca que le dejó cojo».

Es la lesión más rara que jamás hemos leído.

En la reseña de un partido de baloncesto, decía un diario de Madrid: «La nueva jornada enfrentará al Juventud y al Real Madrid. Como prólogo, el Picadero se enfrentará a la infección de garganta y al intestino.»

Y más adelante pregunta a un jugador: «¿Y tú qué has tenido?», y éste responde: «Empecé con gripe. Luego tuve al Vallehermoso con la misma taquilla.»

Vaya follón de información.

En cierta ocasión el Real Zaragoza jugó en San Mamés y perdió por 2-1. En el vestuario, su entrenador Carriega declaraba: «Si hubiésemos logrado empatar, ganamos.»

Yo creo que si hubieran empatado, lo más probable es que hubieran empatado.

Ya saben ustedes que en las carreras ciclistas los corredores marchan agrupados en pelotón, o en solitario si se fugan del resto.

Leemos una información sobre ciclismo y un técnico dice: «Perurena es una gran esperanza. Inteligente, activo. Fuerte. Parece como si le picaran en los pelotones.»

Sabemos lo que quiere decir, pero suena bastante mal.

En un partido jugado en Almería, el árbitro tuvo que ser retirado del campo porque recibió un golpe en la cabeza y luego, en el acta, escribió «que había sido agredido con una tabla de madera».

Hombre, no iba a ser una tabla de multiplicar. Una tabla siempre es de madera.

Leemos en un diario santanderino que «el domingo tendrá lugar una regata desafío entre los remeros de Pedreña y Astillero. Los premios serán de 100.000 pesetas para el primero y 600.000 para el segundo».

Habría bofetadas por llegar el segundo, y como sólo eran dos los participantes, menudo problema.

Fíjense bien qué noticia más rara, de boxeo: «Melbourne: Johnny O’Brien, de Escotralia, conquistó anoche el campeonato del Imperio británico y de la Commonwealth, de los pesos plumas, al vencer al campeón Johnny O’Brien por K.O. técnico en el quinto asalto.»

Seguro que iban a medias Johnny O’Brien y Johnny O’Brien.

Decía un diario deportivo de Madrid: «Las noticias en fútbol son como las brújulas de cualquier bebida gaseosa.»

Ni las brújulas sirven para eso, ni las gaseosas tienen brújulas. Serán burbujas.

Hablando de tenis, un diario burgalés aseguraba que «se ha celebrado en el Pabellón de Deportes del Real Madrid la segunda y última jornada de los octavos de final de la Copa del Rey de Rusia de tenis, entre los equipos de Italia y España».

¿Sería la Copa de Lenin?

En un diario vasco leemos: «Alicante. Las selecciones de promesas de España e Inglaterra han empatado a cero goles en encuentro amistoso disputado en el estadio de La Viña.» Y agregaba muy serio: «Al descanso se llegó con este mismo resultado.»

Pues ¿qué esperaba?

He aquí una frase antológica de un diario deportivo, aparecida en crónica relacionada con la Vuelta Ciclista a la Rioja: «La etapa del domingo, putada, si así podemos llamarla, por tierras de la Rioja Baja y Navarra, transcurrió de principio a fin en pelotón.»

Sin comentarios.

En 1966 un diario de Madrid publicaba esta noticia: «El Caudillo capturó una ballena de diez metros y veintitrés mil quilos de peso.»

Y en otro periódico de ese mismo día se decía: «El Caudillo captura una ballena de veinticinco toneladas de peso.»

Para que luego digan que entonces no había libertad de prensa.

En una información sobre pelota vasca, decía un diario donostiarra: «Azcárate venció a García Ariño, que jugó nervioso a causa de las pelotas.»

Pues podía haber ido antes al médico.

El Zaragoza jugó y perdió un partido en el estadio insular de Las Palmas, y decía un diario deportivo de Barcelona: «La desgracia no sólo estuvo en la lesión de Javier, sino que su hermano también salió mal parado del lance, habiéndose diagnosticado por un golpe en la rodilla de Ramis y Novial.»

Ramis y Novial deben ser dos jugadores canarios, según esta crónica.

Dice un titular: «El ciclista De Wolf muere en accidente», y luego en la información cuentan que después de ser arrollado por un camión fue trasladado a un hospital, donde los médicos declararon que «su estado no parece de gravedad».

Entonces ¿de qué murió?

Aseguraba un diario de Salamanca: «En los últimos días están cruzando la frontera gran número de cazadores con destino a la zona central castellana, principalmente Valladolid, y todos con la ilusión de conseguir apoderarse de los colmillos de elefante que tanto abundan en las llanuras castellanas.»

Es una cosa tremenda, la cantidad de colmillos de elefante que hay por esa zona. Eso y piñas.

En un diario deportivo nacional leemos: «El equipo profesional de baloncesto Cincinnati Royal venció anoche a la selección olímpica española por el resultado de 127 a 2, en partido presenciado por tres mil personas.»

Luego agrega: «Los jugadores españoles exhibieron un juego rápido y una gran puntería en los tiros a canasta.»

Después de ese 127 a 2, si encima no tienen puntería se quedan en cero.

Los equipos del Luchana y el Alavés se enfrentaron anoche entre sí en partido amistoso, y un diario donostiarra decía esta frase: «Una vez más el pez pequeño se comió al chico.»

Pues pobre chico y pobre cronista, porque no tiene ni idea de cómo es el refrán que quiso nombrar.

En un emocionante partido Barcelona-Español, decía al día siguiente un diario de la Ciudad Condal: «El segundo tiempo no llegó hasta el minuto 45, cuando la delantera azulgrana estaba a punto de marcar.»

Es que los árbitros hacen cada cosa…

Después de una gira triunfal, la selección española de baloncesto regresó a Barajas, y decía un periódico bilbaíno: «Un cordón policial evitó que los deportistas españoles pudieran llegar indemnes a sus automóviles.»

Si lo evitó, llegarían vapuleados los pobres.

Informaba un periódico de Madrid que «en Alcázar de San Juan había dado comienzo la tradicional prueba ciclista local en su XXV edición», y agregaba: «Salieron 30 corredores y se clasificaron 39.»

Esta sí que es gorda. ¿Será que se agregaba el que quería?

La atleta norteamericana Mary Decker se preparaba para los Juegos Olímpicos, y en una amplia crónica que le dedicó un diario de Madrid, se decía: «En Eugene vive con su actual compañero sentimental y guardaespaldas, el lanzador británico de disco Slaney, que pesa 130 kilos, mide casi dos metros de altura y tiene la costumbre de comer fotógrafos para desayunar.»

Así ya podía estar gordo, qué caramba.

Al volver de jugar un partido en Sarriá, los jugadores del Athletic de Bilbao declararon que todo había ido bien, salvo el defensa Aranguren, que al parecer venía lesionado. Según palabra del entrenador, «hasta el jueves no sabremos en definitiva lo que tiene. Acusa molestias en un tobillo y en el muslo y tendrá que someterse a reconocimiento público».

O sea que el jugador sería exhibido en un escaparate, para que el público dijera si tenía bien el tobillo y el muslo. Si el jugador es tímido, pasaría un mal rato.

De un diario deportivo de Madrid: «En Las Vegas se proyecta construir un gran frontón de 55 metros, para las especialidades de cesta-punta, con una capacidad de espectadores alrededor de siete.» Y todavía agrega: «Será seguramente la instalación de mayor capacidad de las conocidas hasta ahora.»

Pues no tienen ni idea, porque en Éibar hay un frontón en el que por lo menos caben 8 o 9 espectadores.

En mayo de 1966 el púgil norteamericano Cassius Clay retuvo en Londres el título mundial de los grandes pesos al vencer por K.O. al británico Henry Cooper. En un diario de deportes cuentan lo que fue el combate y dice que en el sexto asalto le dio una auténtica paliza, «lanzándole a la Luna».

Imagínense la fuerza de los puños de Cassius Clay, que sin necesidad de cohetes manda a un peso pesado a la Luna.

Leemos en un periódico de Vitoria: «Seis montañeros alaveses intentarán la ascensión a las cuatro cumbres de los Huandoys, montaña situada en los Andes peruanos que superan los seis metros de altitud.» Y seguía: «La expedición ha necesitado de muchas horas en los despachos oficiales para no conseguir un duro.»

Pues menuda sorpresa se llevarían cuando llegasen a Perú y se encontraran con que los Andes tienen 8500 metros de altitud… y encima sin dinero. Como para perder la afición.

En partido de competición el Rayo Vallecano venció por el amplio tanteo de 6-0 al Indauchu, y, según leímos en un diario madrileño, «todos los goles fueron conseguidos durante el descanso».

Ésta es una nueva táctica; cuando el equipo visitante marcha a la caseta, ellos se quedan en el campo y meten los goles que les parece bien.

Noticia fechada en Sao Paulo (Brasil): «El XXI Campeonato Internacional de Golf de Brasil, en el que participan 15 jugadores, de los que 30 son profesionales, ha comenzado ayer.»

Será que cada uno valía por dos.

En un pronóstico de lo que será la jornada del próximo domingo en fútbol, leemos: «Partido Córdoba-Murcia. El sprint final del Murcia es increíble. Lleva nada menos que nueve jornadas sin ganar un partido, y si continúa a ese ritmo, seguro que el año que viene jugará en Primera División.»

Será por fallecimiento de los contrarios.

Durante la Liga-63, el Deportivo de La Coruña derrotó al Athletic en San Mamés por 1-3 y al día siguiente decía la Hoja del Lunes: «El final se lo pueden imaginar ustedes. Alegría desbordante de los jugadores gallegos y carrerilla hacia la ducha de los atléticos, con el rabo entre las piernas.»

Se celebró el III Rallye Nocturno, organizado por la Peña Motorista de Vizcaya y leemos en una revista del motor: «Como colofón, la organización obsequió a todos los participantes y demás invitados, hasta un total de 300, con una magnífica cena, sobre una distancia de 90 kilómetros y dando cinco vueltas a un mismo circuito.»

Menuda faena les hicieron a los señores invitados.

Leemos en un diario de Madrid, que «el Centro Deportivo Municipal de Vigo será el escenario del encuentro de rugby sobre patines entre las selecciones de Portugal y España».

¿Se imaginan ustedes un partido de rugby sobre patines?

El Real Betis ganó en su campo a Las Palmas por 4-1 y, al narrar las incidencias del partido, la Hoja del Lunes de Alicante relataba así el cuarto gol del Betis: «Minuto 90. Córner que saca Cardeñosa y Gordillo establece el empate definitivo.»

Un extraño empate a cuatro-uno.

De un cross celebrado en Lasarte (San Sebastián), decía un diario bilbaíno: «Entre los atletas participantes se comieron 500 kilos de naranjas.» Esto decía el titular, pero en la información decía esto otro: «Entre todos los atletas de una y otra categoría se comieron ni más ni menos que quinientas naranjas.»

¡Pero qué naranjas, porque cada una pesaba un kilo!

El Hércules de Alicante jugó en Sabadell y perdió por 5-2, y a cuenta de este partido dijo un cronista: «El Hércules, salvo honrosas excepciones, ha sido el peor equipo que ha pasado por la Cruz Alta.»

Será «salvo deshonrosas excepciones».

A cuento de una asamblea de la Federación Nacional de Fútbol, leemos: «La presidencia fue presidida por el presidente don Pablo Porta.»

Lo que no dice es si la vicepresidencia fue vicepresidida por el vicepresidente, pero lo damos por sabido.

«En las pruebas de atletismo celebradas ayer, Blanca Miret logró un salto de longitud de 44 metros.»

Eso no es un salto. Eso es un vuelo.

El corredor ciclista Pérez Francés, en vísperas de una Vuelta Ciclista a España, declaró: «Con el corazón en la mano, creo que puedo ser vencedor de la Vuelta y del Giro.»

Pues ya tiene mérito correr con el corazón en la mano.

Y ya que estamos metidos en deportes, vemos en un crucigrama publicado en la revista Ama (núm. 204) en el 4 horizontal, donde se lee: «Célebre futbolista griego», y una vez resuelto el mismo sale «Esopo».

Publicaba un diario de Bilbao, en su página de deporte rural, la fotografía de dos bueyes uncidos al yugo y junto a ellos un aldeano. Al pie se lee: «Éstos son los bueyes Cordero y Apala con su dueño Dionisio Olabarrieta (a la derecha).»

Comentando un partido regional leemos en una crónica: «Con la ventaja en el marcador, los morados cerraron sus líneas, ya que los tomateros, que ayer vestían de verde, se adelantaron en el marcador y los contragolpes de los granates eran continuos.»

Sólo faltaba que dijera que en el partido no hubo color.

Combate de boxeo en Neuwied (Alemania): «Lambert cayó desvanecido en el ring al tercer round de su pelea con Kloesges, muriendo en el acto. El combate fue inmediatamente suspendido por el árbitro de la contienda.»

Fue una sabia decisión arbitral.

«Los balones blancos con puntas negras, impuestos por la FIFA, molestan a los jugadores.»

¡Y a quién no!

«Arbitró bien el señor Pintado, del Colegio Catalán, que estuvo regular.»

Lo que no dice es cómo estuvo el árbitro.

«Fuerte viento en sentido vertical, que sopló a favor del Elche en la primera parte y del Sabadell en la segunda.»

¿Soplaría de arriba abajo o de abajo arriba?

El que fue entrenador del Atlético de Madrid, Miguel, dijo en unas declaraciones: «Mire usted, yo soy entrenador por la misma razón que un oficinista se marcha a esquiar en invierno y a pescar con fusil en verano.»

Está claro que Miguel no fue oficinista en su vida.

Comentando el partido Bilbao-Valencia, jugado en San Mamés, un diario de Sevilla escribió: «Mucho peligro en los graderíos, sin llegar al lleno.»

Se ve que San Mamés lleno es peligrosísimo.

Partido jugado en Atocha, Real Sociedad-Bilbao, Comentario de la Hoja del Lunes de Bilbao: «Más de tres seguidores bilbaínos en los graderíos. Habían llegado en autobuses —más de cuarenta—, en turismos y por tren.»

Sobrarían plazas a montones.

Del 20 al 27 de mayo de 1967 se celebró en Bilbao el XXVII Campeonato de Europa de Hockey sobre Patines y la Federación Nacional editó un folleto de 40 páginas, con toda clase de datos de fechas y equipos participantes, y al final del mismo viene un recuadro en el que leemos: «Fe de erratas: en la página 7, donde dice “va a haber nueva fiesta de hermandad”, debe decir “va ha haber nueva fiesta de hermandad”.»

O sea que la errata salió en la rectificación. Hubieran quedado mejor dejándolo como estaba.

En una reseña futbolística de la Hoja del Lunes de Bilbao, leemos: «En el minuto 23, recoge un balón Dani, Pilar, hermanos políticos, sobrinos, primos y demás familia.»

Abusón. Jugar con toda la familia. Así cualquiera.

En un diario de Madrid leemos: «El doctor Ibáñez, médico del club madrileño, manifestó que todos los jugadores se encuentran en perfectas condiciones físicas. Tan sólo Salcedo tiene una costilla, pero carece de importancia.»

En esos casos lo mejor es extirpar la costilla.

El 18 de mayo de 1976, el boxeador español José Durán conquistó el título de campeón mundial de los pesos superwelter y el combate se televisó en directo. Al terminar, el locutor del estudio dijo: «Ha sido una gran alegría para todos presenciar el triunfo de Durán en el asalto decimocatorce.»

En noticia relacionada con el Giro de Italia, decía un diario deportivo, en crónica de su corresponsal, que «el corredor portugués Agostinho fue el primer español clasificado en la etapa».

Los portugueses debieron entrar más tarde.

Para compensar tenemos noticia de que «el corredor portugués Fernando Mamede ganó la carrera de cross internacional disputada ayer en Bollumo, cubriendo el recorrido de 9600 kilómetros en 25 minutos y 49 segundos».

Velocidad de reactor. Vaya fenómeno.

Leemos que un cántabro recorrerá en esquí 7000 kilómetros de la Laponia europea, y luego añade que «utilizará dos esquíes de setenta metros de longitud».

Eso no son unos esquíes. Eso es una plataforma nuclear.

Decía un diario asturiano que «el jugador Enrique Castro Quini lleva marcados veinte goles en lo que va de temporada y casualmente todos de cabeza»… y entre paréntesis agrega: «(Tres de ellos de penalty.)»

Tiene que ser dificilísimo tirar un penalty con la cabeza y marcar gol.

Un diario logroñés escribía: «Con motivo de las fiestas del Pilar se corrió en Zaragoza una pedestre popular, en la que tomaron la salida más de cien mil corredores.»

Cuando llegara el primero a la meta, todavía estarían saliendo corredores. Vaya éxito de inscripción.

Tomado de un diario deportivo: «Noche ventosa en Valencia, con lluvia intermitente y alrededor de media entrada en el Luis Casanova, que acabó con una buena entrada cuando abrieron las puertas del estadio.»

Nos gustaría saber cómo entraron los que habían ocupado medio aforo, si las puertas estaban cerradas.

Un avispado cronista deportivo de un diario vasco, cuando faltaban tres jornadas para acabar el Campeonato de Liga, hizo un esfuerzo mental y escribió: «Estas últimas jornadas van a estar llenas de interés y es posible que en ellas se decida quién será el campeón.»

A continuación —suponemos— el autor de la frase ingresaría en una clínica para someterse a tratamiento.

El verbo andar es muy frecuentemente maltratado por los informadores —algunos, claro— porque es frecuente leer que «la defensa no se andó con contemplaciones»… o que los del equipo visitante «no se andaron con chiquitas» o que el árbitro «no se andó con paños calientes».

Pobre verbo andar… con lo bueno que era.

Noticia fechada en Lisboa: «En el Campeonato del Mundo de Hockey sobre Patines, Argentina derrotó a Inglaterra por ocho a cero. Al descanso se llegó con el resultado de once a cero a favor de Argentina.»

En el intermedio les debieron anular tres goles.

«Por su parte, el entrenador Kalmar, que sufre fisura de costilla como consecuencia del apretado abrazo que le dio un amigo, tampoco asistió a los entrenamientos.»

Hay cariños que matan.

En la biografía del jugador Ignacio Eizaguirre (pág. 342) del libro 100 famosos del deporte, de Fernando Vadillo, se dice que «debutó en 1941 con el Valencia, jugando contra el Madrid en el viejo Chamberí».

El Real Madrid no ha jugado ningún Campeonato «en el viejo Chamberí». Siempre lo hizo en el viejo Chamartín.

«A Mesones le huele tanto el retraso a pólvora, que Paquito ya se está trajinando la libertad del Hércules para entrenar al Valladolid.»

Se supone que donde dice «retraso» querría decir «trasero», que tiene las mismas letras pero distinto significado.

Perurena es un vascote que batió el récord mundial de levantamiento de piedra, y, hablando de él, decía un diario bilbaíno: «Es un auténtico atleta. Tiene tanta agilidad que toca el suelo con la cabeza sin doblar la cintura.»

Hagan ustedes la prueba, y si lo consiguen, premio.

Un partido que jugó el Málaga en Sevilla, lo perdió, y en los vestuarios su entrenador hizo estas apasionantes declaraciones: «Generalmente, los partidos unas veces se ganan, otras se pierden y otras veces se empatan. El Málaga unas veces los pierde, y otras los gana o empata.»

Sí, señor, así se habla, porque cuando se habla, se habla, y cuando se calla, se calla… y otras veces ni fu ni fa.

«Seis equipos de ciclistas se han inscrito para tomar parte en el XXIII Campeonato de España por regiones para profesionales. Los premios se concederán a los nueve primeros clasificados.»

Toma ya. Actuarán seis equipos y habrá premios para nueve. A saber qué enjuague harían.

Cuando el boxeador Urtain estaba en plena forma, se enfrentó en Barcelona a un púgil alemán y en un diario de la capital catalana se hablaba del combate y en el titular decía: «Urtain: “Tumbaré a Krause antes del primer asalto.”»

Le zurraría en el vestuario antes de salir.

Se corrió en Llodio (Álava) una prueba ciclista y en un diario alavés, comentándola, decían: «Prácticamente, la carrera se hizo en pelotón y careció de emoción. Faltando 500 kilómetros para la llegada, comenzó el demarrage final.»

Quinientos kilómetros demarrando es mucho demarrage y bastante desmadre.

Leemos entre las sanciones del Comité Nacional de Competición de la Federación Nacional de Fútbol: «Suspender por ocho partidos a Rentería, del Huelva, por agresión mutua.»

Se conoce que Rentería se agredió a sí mismo.

Noticia a nivel europeo: «El Celtic de Glasgow ha ganado hoy la Copa escocesa al vencer ayer por la tarde al Dundee United por tres a cero.»

Se conoce que esperaron a ver en vídeo el partido y comprobar que los tres goles eran válidos.

Leyendo esta noticia uno no se explica los problemas económicos de algunos clubs de fútbol: «Ayer, en el Manzanares, el Atlético de Madrid venció al Sabadell por dos a cero. Asistieron unas quinientas mil personas.»

Por las dimensiones, más que llamarle Manzanares, debieran llamarle ¡¡el Danubio!!

En un diario navarro leemos: «Han finalizado las “24 horas de Le Mans” con un triunfo rotundo de los coches norteamericanos. El vehículo de McLaren ganó oficialmente por veinte años, que es, aproximadamente, la distancia que le separaba del número uno en el momento de la partida.»

Si la distancia era de 20 años luz, McLaren ganó por 189 billones de kilómetros más o menos. Aproximadamente, 5160 millones de veces la distancia de la Tierra a la Luna.

En 1969 el R. C. D. Español de Barcelona tuvo sus problemas con la afición, a cuenta de la mala racha de su equipo. Y de pronto leemos en un diario de Madrid: «El fichaje de Riera por el Español ha tranquilizado el ambiente.»

Vaya, menos mal, piensa uno. Pero luego leemos la noticia que iba bajo ese titular y dice: «El fichaje de Femando Riera por el Español ha caído como una bomba por estas tierras.»

Total, que al lector le quedó clara la cuestión.

Leemos en diario de Bilbao: «Mucho público en el campeonato de pesca de señoras en Portugalete.»

Serían señoras solteras.

En vísperas de un Barcelona-Español, un periodista catalán le preguntó al delantero centro azulgrana Marcial por la moral del equipo ante el partido del domingo y le pidió su pronóstico sobre el resultado. El jugador contestó: «No doy ningún pronóstico porque no me gusta darlo antes de los encuentros.»

Se ve que a Marcial lo que le gustaba era dar el pronóstico al día siguiente de jugado el partido.

En un trascendental Barcelona-Real Madrid y cuando el marcador señalaba empate a uno, un defensa blanco marcó un gol decisivo en su propia puerta, y un diario barcelonés lo relataba así: «Cuando todo parecía resuelto, el defensa madridista despejó un balón con tan mala suerte que marcó en su propia muerta.»

He aquí el extraño caso de un linotipista que confunde la «epe» con la «me».