ESCENA TERCERA

Noche. Campamento marroquí al extremo del desierto.

Hay una hoguera de centinela y varios guerreros entregados al descanso.

Un esclavo (Llega, mesándose los cabellos):

¡El caballo blanco del emperador ha desaparecido!

Otro esclavo (Que llega, a su vez, desgarrándose las vestiduras):

¡Han robado el traje sagrado del emperador!

Un centinela:

¡Cien palos a cada uno si no apresáis al ladrón! (Los guerreros montan en sus caballos, y parten a galope tendido en distintas direcciones.)