PREFACIO

Me he ceñido a los hechos reales documentados que tuvieron lugar durante la época de los asesinatos de los torsos del Támesis, y muchos de los personajes que aparecen en esta novela existieron en la realidad, pero por el bien de la historia, y de la secuela que está por venir, me he tomado ciertas libertades con ellos, con su vida privada y, por supuesto, con su personalidad. Quisiera disculparme ante todos ellos, y confío en que sus almas puedan perdonarme. Al fin y al cabo, esto es una novela, y no un libro de historia.

Si alguien decide volver a darme vida entre las páginas de un libro cien años después de mi muerte, espero que lo que quede de mí disperso en el viento y la lluvia sonría un poco y se tome los cambios que se hagan en mi vida con buen humor.

Los asesinatos, sin embargo, ocurrieron de verdad. Y nunca fueron resueltos.