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Señores: El tema de nuestra conferencia de esta noche serán los principios de la defensa.

Si el ataque consiste en apartar los obstáculos de nuestro camino, la defensa es el arte de reforzarlos, de afirmar nuestras posiciones y de parar los golpes del contrario. Cuando nuestra posición no sea inferior a la de nuestro oponente y, a pesar de ello éste se apreste a atacarnos, desdeñémosle, desarrollemos nuestras fuerzas de reserva, evitemos su ataque mediante ligeros movimientos defensivos (como el boxeador de primera categoría que con un movimiento imperceptible evita el golpe) y desarrollemos rápidamente un contraataque. En el caso, sin embargo, de que nos hayamos comprometido en una acción desgraciada y hayamos dado oportunidad al enemigo de atacar algún punto débil en nuestras posiciones (1o cual puede ocurrirle al jugador más prudente, como consecuencia de un ataque fracasado) debemos actuar de forma muy distinta.

También aquí el sentido común nos indica claramente lo que tenemos que hacer. Toda posición tiene puntos expuestos a la acción de las fuerzas enemigas y otros puntos bien defendidos. Un ataque se dirigirá, evidentemente, contra los puntos débiles en primer lugar; por ejemplo contra el Peón g y h después del enroque, o contra un caballo situado en 3A, etc. Es, pues, muy importante evacuar estos puntos si están ocupados por una pieza importante, la dama o la torre por ejemplo y también, frecuentemente, cuando estén en ellos el caballo o el alfil; en segundo lugar, hay que apoyarlos y hacerlo desde puntos difícilmente accesibles al enemigo. En cuanto al resto de nuestro ejército, es mejor emplearlo en vigilar la fuerza de reserva del enemigo de modo que a éste le cueste tiempo y esfuerzo el utilizarla para apoyar su ataque.

Hablando en general, el objetivo de un ataque enemigo radica en obligarnos a cambiar la posición de nuestras piezas en una determinada región del tablero. Hay que abstenerse, pues, de hacerlo voluntariamente, a no ser que tengamos poderosas razones para ello. Este es un error muy común entre los jugadores de ajedrez. Para evitar, por ejemplo, el avance de un caballo o de un alfil a 5C, avanzan su PT a 3T, con lo que pierden una jugada y, además, debilitan la fuerza defensiva de la cadena de peones del ala correspondiente. O bien avanzan el PCR a 3C para obligar a retirarse a un C enemigo colocado en 4AR; si bien esta posición del caballo es amenazadora, no es ni la mitad de peligrosa que la jugada citada; o bien tienen que retirar una pieza porque la han avanzado demasiado. Para realizar todos estos movimientos hay que esperar el momento oportuno en que el enemigo no pueda aprovechar el tiempo así perdido para mejorar su posición y tomar ventaja de ellos.

Todos los movimientos defensivos deben, por supuesto, acomodarse a los propósitos del ataque enemigo. Para realizarlos hay que invertir las reglas dadas para el ataque; evitar que el adversario cree puntos fuertes demasiado cerca de nuestras líneas defensivas. Esta regla resume toda la defensa, como veremos en los ejemplos siguientes:

1. e4 e5
2. Cf3 Cc6
3. d4 exd4
4. Cxd4 Cf6
5. Cxc6 bxc6
6. Ad3 d5
7. e5

Hasta aquí, las negras han seguido los principios fundamentales del desarrollo. No han dado ocasión a las blancas para atacar, al no dejar debilitarse ninguno de sus puntos principales. La maniobra atacante de las blancas es, por tanto, prematura.

7. … Cg4
8. 0-0 Ac5
9. h3

A continuación las negras realizan un inteligente contraataque que demuestra la imprudencia del juego de las blancas.

9. … Cxe5
10. Te1 Df6
11. De23 0-0
12. Dxe5 Dxf2+
13. Rh1 Axh3
14. gxh3 Df3+
15. Rh2 Ad6

y las negras ganan.

1. e4 e5
2. Cf3 Cc6
3. d4 exd4
4. Ac4 Ac5
5. 0-0 Cf6

5…d6 hubiera estado más de acuerdo con nuestras reglas. El movimiento realizado es algo inferior y otorga a las blancas la posibilidad de llevar a cabo un violento ataque, el cual, dado el magnifico desarrollo de las negras, fracasa contra una línea de defensa superior.

6. e5 d5

La respuesta correcta. Retirar el caballo sería notablemente inferior. Si, por ejemplo, 6…Ce4 7.Ad5 desorganizaría todo el juego de las negras. Y si 6…Cg4 7.Axf7+ Rxf7 8.Cg5+ sería la continuación.

7. exf6 dxc4
8. Te1+ Ae6
9. Cg5 Dd5

No 9…Dd7 porque 10.Cxe6 fxe6 11.Dh5+ y las blancas ganan el AR.

10. Cc3 Df5
11. g4 Dg6

Las negras no deben tomar el PAR, ya que las blancas contestarían con 12.Cd5 Dd8 13.Txe6+ fxe6 14.Cxe6.

Las negras amenazan ahora con enrocar por el flanco de dama y quedar en magnífica posición, ya que las blancas han debilitado la solidez de la suya al realizar sus maniobras atacantes.

12. Cce4 Ab6
13. f4 0-0-0
14. f5 Axf5
15. gxf5 Dxf5

Al fin las blancas han conseguido recuperar su material, pero ¡a qué precio! Tiene tres peones atrasados, su rey está en una posición enteramente insegura, su enemigo ha desarrollado brillantemente sus piezas y tiene su Peón c y d muy avanzados y bien protegidos, dispuestos a llevar a cabo una acción decisiva a la menor oportunidad que se les ofrezca. Y todo esto por una pieza menor.

16. fxg7 The8
17. Cg3 d3+
18. Ae3 Axe3+
19. Txe3 Dc5

o bien 19…Dxg5 y ganan también. Se llega a conclusiones parecidas, sea cualquiera la variante que elijan las blancas, después de la jugada 13.

Volvamos, pues, a ella y variemos el ataque.

13. Cxf7

Un valiente sacrificio para sostener el ataque. Si el rey o la dama toman el caballo, Cg5 recupera la pieza y queda en excelente posición. Si 13…Axf7, las blancas deben quedar satisfechas con llevar al rey a una posición bastante insegura, mediante: 14.fxg7 Dxg7 15.Cf6+ Rd8 16.Df3, con buenas posibilidades de ataque contra el rey indefenso. Las negras, no obstante, pueden oponer una réplica igualmente audaz que le da la vuelta por completo a la situación y le permite atacar el débil flanco de rey de las blancas.

13. … 0-0

Ahora, con una sola jugada, todas las piezas blancas quedan mal situadas y deben retroceder rápidamente hacia su campo. El juego se invierte y empieza la reacción.

14. Cfg5 Ad5
15. fxg7 Tfe8
16. Cg3 h6
17. Ch3 Ce5

y ganan las negras. O quizás sería más efectivo:

17. … Txe1+
18. Dxe1 Te8
19. Dd1 Ce5
20. Cf4 Df6

con un brillante ataque.

1. e4 e5
2. Cf3 Cc6
3. c3

La apertura Ponziani. No me parece recomendable debido al avance prematuro del Peón c.

3. … d5

Una excelente réplica. Con su tercera jugada, las blancas han debilitado la casilla d3; las negras, por tanto, abren su columna de dama para tomar posesión de este importante punto.

4. Da4 dxe4
5. Cxe5 Dd5
6. Ab5 Cge7
7. f4

Este es el movimiento aconsejado por Staunton, para intentar mantener el ataque, el cual después del cambio de piezas menores, se perdería por completo. Las blancas amenazan con A4A y Staunton deja contestar a las negras, por tanto, 7…exf3. Un excelente jugador de Liverpool, considerando la posición con el instinto de un verdadero jugador de ajedrez, sugirió una contestación mejor al ataque precipitado de las blancas. He aquí cómo venció a uno de sus contrarios en una partida de campeonato.

7. … Ad7
8. Cxd7 Rxd7
9. 0-0 Cf5

Las negras tienen un desarrollo mucho mejor y amenazan con Ac5+

10. b4 a5
11. Rh1 axb4
12. Axc6+ bxc6
13. Dxa8 Ac5
14. Dxh8 Cg3+
15. hxg3 Dh5 mate.
BLANCAS NEGRAS
BLACKBURNE BURN
1. e4 e6
2. d4 d5
3. Cc3 Cf6
4. e5 Cfd7
5. f4 c5
6. dxc5 Axc5
7. Dg4 0-0
8. Ad3 f5
9. Dh3 Cc6
10. Cf3 Te8

Evidentemente, las negras están preparando su flanco de rey, para llevar a cabo un largo asedio. Su última jugada sirve admirablemente a su propósito. La torre abandona la casilla f8 para dejar su sitio al caballo, que está allí perfectamente seguro y apoya al punto más débil, el Peón h, además de a e6 y g6 y está dispuesto para obstruir en cualquier momento la columna de g.

11. g4 g6
12. a3

Uno de aquellos movimientos sin objetivo visible alguno, para prevenirse de algo que, en realidad, no es una amenaza real. Estos movimientos superfluos perjudican mucho un juego. ¿Por qué no jugar Dg3 y después adelantar vigorosamente el Peón h?

12. … a6
13. Ad2 b5
14. gxf5 gxf5
15. 0-0-0 Cf8
16. Thg1+

Un atrevido sacrificio que proporciona un violento ataque, muy difícil de evitar.

16. … Axg1
17. Txg1+ Cg6
18. Ce2 Ta7

Una excelente maniobra defensiva. La torre protege varios puntos débiles y puede ser utilizada para cerrar la columna abierta g.

19. Cg3 Tee7
20. Ch5 Rh8
21. Cf6 Tg7
22. Dh6 Cf8
23. Cg5

Las negras están prácticamente fuera de peligro, pero deben jugar todavía con gran cuidado. Las blancas pretenden ahora continuar con: 24.Dxg7+ Txg7 25.Cf7+ Txf7 26.Tg8++.

23. … Tg6
24. Dh5 Tag7
25. Tg3 De7

Un nuevo apoyo para el Peón h. El ataque de las blancas se viene abajo, porque no tiene salida para sus dos alfiles y necesita de ellos para apoyarlo.

26. Ae2 Txf6

Movimiento vigoroso y decisivo.

27. exf6 Dxf6
28. Tc3 Ad7
29. Cf3 Rg8

Las blancas amenazan Txc6 seguido de Ac3.

30. Dh3 Cg6
31. Dh6 De7
32. Txc6 Axc6

Un último intento para neutralizar la superioridad material de las negras por medio del ataque.

33. Ac3 Tf7
34. Cg5 Cxf4
35. Cxf7 Cxe2+
36. Rd2 Cxc3

Y las negras ganan después de unas cuantas jugadas.

Esta posición del diagrama se produjo en mi partida con Steinitz. Juegan las blancas. Un poco precipitadamente jugué:

1. Tf1

Creyendo que Cxd7 hubiera llevado a tablas por jaque perpetuo. Esto, sin embargo, no era exacto (como creo que señaló Tschigorin), pues el juego podría haber seguido: 1.Cxd7 Db1+ 2.Rd2 Dxb2+ 3.Rd1 Db3+ 4.Re2 Dc4+ 5.Re1 Dxc3+ 6.Ad2 Da1+ 7.Re2 y las blancas ganarían fácilmente.

1. … Dc2
2. Ad2 Te7
3. Ce6 Dxe4+

Las blancas deben ser extremadamente cuidadosas al seleccionar su respuesta, pues si juegan: 4.Rd1 Db1+ 5.Ac1 Cd3 6.Dxd6 Cxb2+ 7.Re2 De4+ 8.Ae3 Dxe3+, igualando las fuerzas materiales y con probabilidad de hacer tablas.

4. De3 Dxg2+

Ahora sigue una importante maniobra que será la clave de la defensa de las blancas.

5. b3

Si 5. De2, las negras contestarían Dd5 y dominarían todo el flanco de dama.

5. … Te8

No basta tomar el Peón h para mantener una igualdad de fuerzas; las blancas contestarían con Rd1 o b5 y muy pronto estarían en condiciones de asumir el ataque.

6. De2 Dh3

El primer síntoma del agotamiento progresivo del ataque negro. La dama estaría mejor colocada en el flanco de dama; pero no puede jugar Dd5, ya que c4 obligaría al cambio de damas.

7. Rd1 Ta8
8. Tf2 Ta2

Las piezas negras están bien colocadas pero carecen de fuerza ofensiva.

9. b5 c5
10. Cxg7 d5
11. Rc1

Las blancas intentan poner en juego a su torre para precipitar el final.

11. … Dd3

11…c4 hubiera sido contestado con 12.bxc4; y 11…Cd3+ con Rb1 y los cambios resultantes resultarían siempre en ventaja para las blancas.

12. Dxd3 Cxd3+
13. Rb1 Tb2+
14. Ra1 Txb3
15. Tf3

y las blancas ganaron el final.

El diagrama anterior muestra el estado de la partida 18 en su jugada 33, de mi match con Steinitz. Juegan las blancas. Les recomiendo que estudien cuidadosamente esta Posición, en la que las blancas únicamente pueden mantener el equilibrio mediante una maniobra defensiva muy ingeniosa. La cuestión estriba solamente en la siguiente jugada de las blancas. Las negras amenazan con 1…Cxf3+ 2.Cxf3 Axf3 3.Dxf3 De1+ y ganan.

¿Cómo pueden salvar las blancas esta partida?

Si

1. Tc2 Txc2
2. Axc2 Dc6
3. Rg2 Cxf3
4. Cxf3 Ce5

recuperando la pieza y con un peón más.

Si

1. Te2 Tc1
2. Ac2 Dd5
3. Td2 Dxf3

o bien

3. Td2 Cxf3+
4. Cxf3 Dxf3
5. Dxf3 Axf3
6. Txd7 Txc2

debiendo ganar.

Si

1. Ce3 Tc1
2. Td1 Cxf3+
3. Cxf3 Txd1+
4. Cxd1 Dd5

con un peón más y una posición igualada.

Si

1. Rg2 Cxf3
2. Cxf3 Ce5
3. Td3 Tc1
4. Td8+ Rg7
5. Da7 Dc6

con un ataque magnífico e irresistible.

El movimiento que se ejecutó realmente y que es el único que puede salvar la partida (que terminó en tablas) fue: 1. Rf1! contra el cual las negras deben jugar con gran cuidado para no quedar en desventaja; cualquier ataque violento está condenado al fracaso.

Muchas veces tendrán que estudiar muy profundamente la posición en que se encuentran para lograr encontrar un buen movimiento defensivo. Pero creo, y puedo asegurarlo, que si siguen las reglas que hemos dado no buscarán en vano. Si buscan la forma la encontrarán, por muy peligroso que pueda parecer el ataque al que se enfrentan.