Alegrar el corazón, ver alguna cosa hermosa,
poemas, danzas, cantos,
regocijarse a pleno corazón.
Asistir al pasatiempo de Su Majestad
en el jardín de «la bella aparición».
Ponerse mirra, untarse de aceite perfumado,
vivir una bonita jornada.
¡En tu jardín pon guirnaldas!
¡Alza una flor de loto hasta tu nariz, Amenofis!
Vive por nosotros durante años sin fin.
La mujer acróbata del Sur viene,
y se encuentra con la del Norte.
Pone los pies en la nuca
y las manos en el suelo.