Discurso desapasionado

E

stos humanos pueden ser aquellos que procuramos entender.

¿Llevan programas profundamente arraigados?

Los más profundos se denominan «emociones» pero, a mi juicio, no es esto lo que buscamos.

¿Emociones?

Son similares a nuestros «impulsores».

Pero los impulsores son mandatos fáciles de modificar.

En los humanos están sujetos a la materia según patrones duraderos de sustrato neurológico.

Qué método más ineficaz. Pero al menos así es fácil interpretarlos, registrarlos, anticiparse a ellos.

De hecho no. Sus «emociones» aprenden.

¡Pero programas sujetos a la materia…! Sólo los operarios más toscos los utilizan, y sólo porque los flujos de alta energía les resultan demasiado agotadores.

Por eso es difícil comprender a los humanos. Utilizan métodos que desconocemos, que jamás compartimos.

Por buenas razones.

Antiguas inferencias de nuestras mentes superiores sostienen que los humanos son importantes. También las de otras formas naturales, hoy extinguidas.

Extinguidas gracias a nosotros, espero.

Sí, la mayoría por simple competencia, otras mediante exterminación dirigida.

Me parece reprochable permitir que estas criaturas se infiltren en el Centro Galáctico.

Logramos una opinión unánime acerca de este asunto, como recordarás.

Es una molestia irritante. Creo que esta última incursión también es peligrosa.

Poseen virtudes especiales. Viejas historias lo aseguran.

Su tecnología es marginal, sus cuerpos desdeñables.

Poseen un antiguo conocimiento de lo sensual.

¿Placeres? Un rudimentario dispositivo evolutivo para provocar la acción… nada más.

Nosotros necesitamos placer en ocasiones.

Como recompensa, incluso como meta… es verdad. ¿Pero qué podrían enseñarnos formas orgánicas tan limitadas?

Su limitado espacio de percepción puede darles cualidades estéticas especiales.

Imposible.

Las limitaciones posibilitan los logros. Un poema en color sin restricciones es peor.

¿Cuál es el alcance de estos seres, pues?

Ven en tres colores, perciben aromas y…

¿Sólo tres? ¿Y cómo pueden orientarse estas criaturas casi ciegas?

Mal. Pero son Naturales, te lo recuerdo. Heredaron artes extrañas.

Que nosotros hemos superado hace tiempo.

Estéticamente, tal vez no.

Son obsoletas, como todas las formas orgánicas.

Eso es una opinión ideológica, no un dato probado.

¡Es el sentido de la evolución!

La evolución no tiene sentido.

La construcción de obras más duraderas y sutiles

Una estrategia, nada más. Su utilidad puede ser transitoria.

Nosotros somos esas obras, y nos corresponde juzgar.

Pero todavía estudiamos las nubes de antimateria, preparándonos para nuevas autoevoluciones.

¿Lo sabes?

Debo saberlo, para conocer a fondo nuestros puntos vulnerables.

Yo creía que sólo nosotros, los Analistas, teníamos acceso a esa información.

Pero nosotros, los Estéticos, estamos calificados para saber y comentar.

¡Más problemas de nuestro experimento de doble personalidad! Deseo terminarlo.

Un momento, por favor. La antimateria es nuestra esperanza, nuestro grial. En esto todos debemos estar de acuerdo. En ello radica la salvación de nuestro yo. En esto nos parecemos al phylum de los magnéticos.

No nos parecemos en nada a ellos.

El rechazo te nubla el juicio.

¿Seres sin materia? ¿Qué hay de noble en ello?

Qué concepto tan raro en un Analista… «nobleza».

Háblame más de esos humanos.

Hay más datos pendientes de investigación.

Pues date prisa.