SABORES IGUALES, ESPECIES DIFERENTES

Lady Macneill le dijo a Sir John comiendo bacalao:

—Me temo, esposo mío, que ese pescado no es lo que creéis.

—¿Por qué? —le contestó—. Su sabor, en verdad, no me disgusta.

—Pues no siéndolo, mucho me recuerda la polla de tu hermano.