¿Qué recibió la mujer del soldado
desde Praga, la vieja capital?
De Praga recibió un par de zapatos,
un saludo y zapatos de tacón.
Eso de Praga recibió.
¿Qué recibió la mujer del soldado
de Varsovia, cruzada por el Vístula?
Recibió de Varsovia una camisa
de lino con un hermoso color.
Eso de Varsovia recibió.
¿Qué recibió la mujer del soldado
desde Oslo, bañada por el Sund?
De Oslo recibió un cuello de piel,
un buen regalo de Oslo recibió.
Eso de Oslo recibió.
¿Qué recibió la mujer del soldado
de la rica ciudad de Rotterdam?
Un hermoso sombrero recibió
¡y qué bien sienta un sombrero holandés!
Eso de Holanda recibió.
¿Qué recibió la mujer del soldado
desde Bruselas, la bella ciudad?
De Bruselas, preciosos encajes,
lo que toda mujer siempre soñó.
Eso de Bruselas recibió.
¿Qué recibió la mujer del soldado
desde París, la ciudad de la luz?
Un vestido de seda recibió
—¡qué envidia sus amigas!— de París.
Eso de París recibió.
¿Qué recibió la mujer del soldado
desde Trípoli, en la Libia lejana?
De Libia, una cadena y amuletos,
la cadena de cobre recibió.
Eso de Libia recibió.
¿Qué recibió la mujer del soldado
desde Rusia, el país interminable?
El velo de viuda recibió
de Rusia para ir al funeral.
Eso de Rusia recibió.
(De Schweyk en la Segunda
Guerra Mundial, 1942)