Romance final
de La ópera de cuatro cuartos

Y aquí, para acabar bien,

todo junto está en el saco.

Si hay dinero, no hay problema:

el final no es nunca malo.

Que pesca en río revuelto

dice Fulano a Zutano.

Pero, al fin, los dos se comen

el pan del pobre, abrazados.

Pues unos están en sombra,

y otros bien iluminados.

Se ve a los que da la luz,

pero a los otros, ni caso.

(1929)