Conjuro CLXXX

CÓMO ABRIR A LOS ESPÍRITUS SANTIFICADOS LOS CAMINOS DEL MUNDO INFERIOR. CÓMO DEVOLVERLES LA LIBERTAD DE MOVIMIENTOS, A FIN DE QUE PUEDAN RECORRER MEDIANTE GRANDES ZANCADAS EL MUNDO INFERIOR Y EN­SEGUIDA SALIR DE ÉL. CÓMO DARLES LA POSIBILIDAD DE EFECTUAR TODAS LAS METAMORFOSIS DE UN ALMA VIVIENTE

¡Aquí está Ra que baja hacia el Horizonte Occidental!

Se muestra con los rasgos de Osiris

a través de la radiación de los Espíritus santificados

de todos los dioses del Amenti.

¡Porque él es el único, el dios oculto del Duat,

el Alma sagrada que dirige los destinos del Amenti,

el Ser-Bueno de vida eterna…

Es así que vienen con las ofrendas del Duat

merced a las cuales tú cumplirás el Viaje…

Hijo de Ra, tú provienes de Tum.

Los que habitan el Duat te glorifican.

¡Oh tú, Rey del Aukert, Amo Supremo de la Corona[238],

gran dios cuyo Trono es misterioso,

señor que conoce el peso dé la Palabra,

jefe supremo de los Jueces infernales!

¡Los que habitan el Duat te glorifican y se regocijan contigo!

Los espíritus divinos lloran al enemigo

y se arrancan los cabellos;

te aplauden y te glorifican;

sollozan dando gritos;

se alegran; porque saben

que tu Alma viviente es glorificada en tu Cuerpo inanimado…

Entre gritos de alegría te glorifican las Almas de los muertos…

¡Sublime es, en verdad, el Alma de Ra que mora en el Amenti!

¡Salve, Osiris!

o soy, en tu Templo, un servidor,

habito en la divina Morada en la que se oyen tus órdenes.

¡Que me sea posible ser recibido entre los Elegidos del Duat

como a una gran Luminaria

que el Duat nutre con la esencia de su Ser[239]!

Yo le transito en mi condición de hijo de Ra

me muestro bajo los rasgos de Tum.

El Duat es para mí, en verdad, un lugar de reposo…

La oscuridad que en él reina

yo la manejo a mi voluntad.

Entro y salgo de él sin tener dificultades.

He aquí que tú extiendes, ¡oh dios Tatunen[240]!, tus brazos hacia mí.

Al colocar, completamente derecha, mi Forma acostada

los que habitan el Duat encuentran nuevamente la tranquilidad de su espíritu.

¡Oh vosotros, Espíritus divinos, extended vuestros brazos y sostenedme!

Porque yo conozco vuestro Nombres misteriosos…

¡Enseñadme el camino que debo seguir!

¡Oh vosotros espíritus Bienaventurados, glorificadme!

¡Porque, cuando soy glorificado

son Ra y Osiris los que se alegran!

Heme aquí que coloco ante vosotros las ofrendas;

ésa es la voluntad de Ra.

Yo soy su Elegido, su Heredero en la Tierra…

Mi viaje llega ahora a su término.

He recorrido todas las rutas del Más Allá;

he penetrado a las regiones apartadas del Duat;

entré por la fuerza en la hermosa Amenti;

al espíritu estelar de Sirio presenté mi cetro

a la divinidad cuyo nombre no debe ser revelado,

presenté la diadema de Nemmés…

¡Contempladme, pues oh vosotros, Espíritus santificados!

¡Vosotros, que guiáis las-Almas de los muertos

a través de los caminos que atraviesan el Duat!

¡Ojalá me sea posible llegar a ser un Espíritu santificado

llegar a ser Ordenador de los Misterios!

¡Libradme del poder de los demonios

que amarran sus víctimas al poste,

porque yo soy Heredero de Osiris!

¡Mirad la diadema Nemmés que adorna mi cabeza!

¡Yo llegué a ser carne de vuestra carne al ser el elegido de los dioses

yo soy igual a mi Padre, Osiris,

al que rinden veneración las cuatro regiones del Espacio;

por lo tanto, ¡miradme! ¡Y al mirarme, regocijaos!

¡Ojalá me fuera posible ser enaltecido igual que este dios

que recorre el ciclo de sus Metamorfosis!

¡Abrid a mi Alma divina las Vías celestiales,

para que pueda quedarme en la hermosa Amenti!

¡Corred los cerrojos de las Puertas del Cielo,

porque yo soy quien ubica a los dioses en sus sitios

quien da las ofrendas a las Almas de los muertos y la de los dioses!

¡Yo soy, en verdad, el dios Mehanuti-Ra!

Yo soy el pájaro misterioso Benn, que vive en el Duat.

Yo hago en él mi entrada y al salir de él,

el pájaro misterioso aparece en el Cielo…

Yo atravieso el Cielo nocturno, siguiendo a Ra;

yo encuentro en los Campos de Ramis ofrendas celestiales;

en los Campos de los Bienaventurados encuentro mis ofrendas terrestres.

Yo avanzo bajo los rasgos de mi Cuerpo Glorioso,

el de los atributos misteriosos…

Son grandes mis pasos.

Mis Metamorfosis representan el doble dios Horus-Seth…

Es así que los Espíritus divinos que preceden a Ra

me llevan en su Barca celestial;

porque yo soy igual al Alma misteriosa

que vive eternamente en el Amenti…