Conjuro CLII

PARA CONSTRUIR UNA CASA EN LA TIERRA

¡Salve, Keb! ¡Regocíjate!

Porque he salido de mi cuerpo

planeo sobre él.

Heme aquí que transito por el Cielo al lado de los dioses:

yo asigno sus padres a las Almas de las generaciones futuras[202].

Al verme, ellas me glorifican.

Aquí está Sesheta[203]; trae consigo al demonio Nebt;

está fuertemente atado. Anubis me grita:

«¡Construye en la Tierra su casa!

Sus cimientos estarán en Heliópolis;

sus límites llegarán a Kher-Aha;

sus santuarios estarán en Sekhem

será renovada su inscripción.

Los que transiten le darán sus ofrendas y libaciones».

Después Osiris dice a los dioses que lo rodean:

«¡Observad aquella casa que está allí!

Fue construida por un Espíritu santificado.

Está protegida por barreras mágicas;

el difunto sale diariamente y permanece con vosotros.

Su juventud y su fuerza no terminas de aumentar.

Ofrecedle vuestra veneración y glorificadle!»

¡Oh vosotros, Espíritus que fuisteis testigos de mis triunfos!

¿Oís mis palabras y las de Osiris?

Él dice: «¡Que venga aquí todos los días!

¡Que su juventud se renueve entre vosotros!»

Éstas son las ofrendas que, vientos del Sur y vientos del Norte

traen a Osiris: ganados, cebada, trigo.

Los traen de todos los lugares de la Tierra Por orden del mismo Osiris…

Ya me dirijo hacia la izquierda,

ya me dirijo hacia la derecha.

Los hombres que viven me observan,

de la misma manera que ven a los dioses

los Espíritus santificados y los muertos.

Saludan con sus gritos de alegría, Mi Barca que pasa…