PARA QUE SU TRONO NO LE SEA ARREBATADO AL DIFUNTO
He aquí mi lugar en el Mundo Inferior
¡Y he aquí mi Trono!
Viajando por los circuitos me acerco a él
y digo estas palabras:
«Yo soy vuestro Señor, ¡oh dioses!
¡Acercaos a mí! ¡Seguid mis pasos,
pues yo soy el Hijo de vuestro Señor!
Mi padre celestial os ha creado;
por mí vivís. ¡Oh dioses»