PARA RECHAZAR LAS MATANZAS
He Aquí la Región
en la que con la Corona Blanca sobre la cabeza[69],
el Cetro de mando en la mano,
permanece sentaldo el Ser divino.
Una vez más ante Él, detengo mi Barca
y pronuncio estas palabras:
«¡Oh Dios poderoso! ¡Señor de la Sed!
¡Mírame!, acabo de nacer.
¡Acabo de nacer! ¡Acabo de nacer!»[70]
Él responde. «Sobre la huella de los castigos que ves aquí
vénse a plena luz tus malas acciones.
Tú las conoces como nadie…
Sin embargo, haré recordar tus faltas»[71].
Yo replico:
«Yo soy Ra que hace fuertes a quienes ama.
Soy el Nudo del Destino cósmico
oculto en el bello Árbol sagrado[72].
Si yo prospero también Ra lo hace.
Ciertamente, ¡observa!
Los cabellos de mi cabeza son los propios del dios Nu,
mi rostro es el Disco solar de Ra.
En mis ojos vive la fuerza de la diosa Hathor.
En mis dos orejas resuena el Alma de Up-Uaut.
En mi nariz viven las fuerzas del dios Khenti-Khas.
Mis dos labios son los labios de Anubis
mis dientes son los propios de la diosa Serkit.
Mi cuello es el cuello de la diosa Isis.
Mis dos manos son las propias del poderoso Seftor de Djedu.
Es Neith, soberano de Sais,
quien vive en mis dos brazos.
Mi columna vertebral es la de Seth.
Mi falo es el falo de Osiris.
Mi hígado es el propio del Señor de Kher-Aha.
Mi pecho, es del Señor de los Terrores.
Mi vientre, mi espalda, los de la diosa Sekhmet.
La fuerza del Ojo de Horus circula por la parte baja de mi espalda.
Mis piernas son las piernas de Nut.
Mis pies son los pies de Ptah.
Mis dedos son los del doble Halcón divino
que vive eternamente.
Por cierto, ¡ni uno solo de los miembros de mi Cuerpo
deja de ser sitial de una divinidad!
Respecto a Thoth, él proteje mi Cuerpo entero.
Como a Ra, cada día me renuevo.
Nadie podría paralizar mis brazos
ni tomar mis manos:
ni los dioses, ni los Espíritus santificados,
ni las Almas condenadas, ni las Almas de los antepasados,
ni los Iniciados, ni los Ángeles del Cielo…
Yo soy el que va hacia adelante
cuyo Nombre es un Misterio.
Yo soy el Ayer,
«El que contempla millones de años»
Ése es mi Nombre.
Yo recorro los caminos del Cielo…
He aquí que me ha sido otorgado el título de Señor de la Eternidad.
Soy proclamado el dios del Devenir
el Amo de la Corona real.
Yo resido en el Ojo divino de Horus y en el Huevo Cósmico
el Ojo de Horus me otorga la Vida Eterna
y al cerrarse me protege…
En medio de radiaciones avanzo por mi camino
y entro a todas partes, a gusto de mi Corazón.
Yo existo y vivo…
Yo soy Horus que recorre los incontables años.
La Palabra y el Silencio equilibrados están en mi boca.
Sentado en mi Trono yo practico el mando…
Ciertamente, mis Formas están transformadas[73].
Yo soy Unnefer, el Ser perfecto,
dios que se adapta a los Ritmos de los Tiempos.
Mi esencia está oculta en mi Ser.
¡Solo existo!… ¡Solo!… ¡Solo!…
Solo recorre las soledades cósmicas…
Ciertamente, yo resido en el Ojo de Horus
y ningún Mal puede alcanzarme.
He aquí que abro las Puertas del Cielo
y que envío Nacimientos a la Tierra.
Y el niño que nacerá
no será atacado en el camino que conduce a la Tierra…
Yo soy el Ayer.
Yo soy el Hoy
de las generaciones incontables.
Yo soy el que os protege todos los días de nuestra vida.
¡Oh vosotros, residentes de la Tierra y del Cielo!
¡Los del Norte, del Sur, del Este y del Oeste!
Ciertamente, ¡el horror ante mí oprime vuestro corazón!
Pues yo me he modelado y formado por mí mismo.
Y no pereceré por segunda vez.
Algunos rayos de mi Ser llegan a vuestros pechos;
pero mis Formas las oculto en mí;
pues yo soy aquel a quien nadie conoce…
¡Oh vosotros, Demonios Rojos!
En vano volvéis vuestras caras hacia mí:
un triple velo me esconde.
No es posible regresar a la época lejana
en que el Cielo fue creado por mí,
en que la Tierra fue separada;
en que fueron ubicados en lugares distintos
los seres nacidos del Cielo y los nacidos de la Tierra.
Una vez divididos ya no volverán a unirse en la Fuente primera…
Mi Nombre extraño es a la mácula del Mal.
Poderosas son las Palabras mágicas
que mi boca os pronuncia.
Una radiación de Luz fluye de todo mi Ser.
Yo soy un Ser circundado de murallas,
en medio de un Universo también rodeado de murallas.
Yo soy un Solitario inmerso en mi Soledad…
No pasa un día sin mi saludable intervención…
¡Pasan! ¡Pasan! ¡Pasan ante mí!
Ciertamente yo soy un Ser pleno de savia
nacido del Océano celeste…
Mi Madre es la diosa del Cielo, Nut.
Ella es quien ha modelado mi Forma.
Yo estoy inmóvil,
soy el Gran Nudo del Destino que descansa en el Ayer;
en mi mano reposa el Destino del Presente.
Por nadie soy conocido
pero yo,os conozco.
Nadie puede tomarme;
pero yo puedo tomaros
¡Oh Huevo Cósmico! ¡Óyeme!
¡Yo soy el Horus de incontables años!
Dirijo hacia vosotros el Fuego de mis rayos
para que vuestros corazones se vuelvan hacia mí.
Soy el Amo del Trono;
libre de todo Mal, recorro los Tiempos y los Espacios…
Soy el Cinocéfalo de oro sin piernas ni brazos,
tonante en el templo de Menfis…
Sabedlo: si me perfecciono ¡también lo hace él,
el Cinocéfalo de oro en Menfis!