[1] Montaigne habla a menudo de su increíble falta de memoria, por ejemplo en II, 17. <<
[2] (a) Podría contar cosas asombrosas, pero en este momento vale más que continúe con mi asunto. <<
[3] Platón, Critias, 108d. <<
[4] Cfr., por ejemplo, Huarte de San Juan, Examen de ingenios (1575), 5: «El entendimiento y la memoria son potencias opuestas y contrarias… porque el celebro es imposible ser juntamente seco y húmido a predominio» (ed. G. Serés, Madrid, 1989, pp. 339-340; a continuación Huarte remite al opúsculo aristotélico La memoria y la reminiscencia). <<
[5] (c1) como suele hacer la gente. <<
[6] Cfr. Publilio Siró, Sentencias, 250: «El olvido es el remedio de las injurias» (citado en Séneca, Cartas a Lucilio, 94, 28). <<
[7] Heródoto, V, 105. <<
[8] Cfr. el proverbio antiguo «El mentiroso ha de tener buena memoria», citado por Quintiliano, IV, 2, 91, y por Apuleyo, Apología, VI, 69, 5. <<
[9] Aulo Gelio, Noches áticas, XI, 11; cfr., por ejemplo, Pedro Mexía, Silva de varia lección, IV, 18. <<
[10] Es un lugar común; cfr., por ejemplo, Aristóteles, Política, I, 2, 1253a, o Cicerón, Los deberes, I, 16, 50. La idea reaparece en el capítulo II, 18. <<
[11] Cfr. Jean Bodin, République (1576), V, 6, para quien «el perjurio es más execrable que el ateísmo…». <<
[12] Aristóteles, Ética a Nicómaco, II, 6, 1106b 27 ss.; cfr, Plutarco, La virtud moral, 5, 444b. <<
[13] San Agustín, Ciudad de Dios, XIX, 7. <<
[14] Plinio, VII, 1, 7, citado en el «Comentario» de Vives al pasaje de san Agustín antes aludido; cfr. también Justo Lipsio, De recta pronuntiatione latinae linguae dialogus, Leiden, 1586. <<
[15] G. y M. du Bellay, Mémoires, IV, ed. 1569, f. 113-117. <<
[16] El rey francés en cuestión es Luis XII. La anécdota se refiere en Erasmo, De lingua, y en Henri Estienne, Apologie pour Hérodote (XV, 34). <<