AGRADECIMIENTOS

Deseo agradecer a las personas que contribuyeron a la realización de este libro. Gracias a mi corrector, David Harris, por detectar errores grandes y pequeños en el primer borrador, y por contribuir a la pulcritud general del texto. Gracias a John Betancourt y a Leigh Grossman, de Byron Preiss Visual Publications, por mantenerme al corriente de todo, y a Byron Preiss por obligarme a cumplir. Gracias a Susan Allison, Laura Anne Gilman y Ginjer Buchanan, de Ace Books, por sus consejos, su aliento y su enorme e inmerecida paciencia. Gracias a Eleanore Fox, que soportó la tarea de pasar a limpio el texto cuando yo debía ayudarla a explorar Londres. Gracias a mis padres, Tom y Scottie Allen, que siempre me han brindado su apoyo familiar y literario.

Y, huelga decirlo, gracias a Isaac Asimov, a quien está dedicado el presente libro. Se requeriría un volumen más largo que este para expresar todo lo que le debemos. Baste decir que sin él no existirían las Tres Leyes ni los robots ni los espaciales ni los colonos. Sin él no habría Inferno.

ROGER MACBRIDE ALLEN