Él nos da el aliento, y la fuerza es su don,

los dioses acatan sus mandatos.

Su sombra es vida, su sombra es muerte;

¿quién es aquel a quien ofreceremos nuestro sacrificio?

Por su poder se convirtió en señor de todo lo que vive,

y de todo lo que reluce,

gobierna el mundo, y al hombre y a las bestias,

¿quién es aquel a quien ofreceremos nuestro sacrificio?

Sus manos modelaron las montañas,

y el mar, según nos han enseñado.

Y son su cuerpo y sus brazos.

¿Quién es aquel a quien ofreceremos nuestro sacrificio?

Creó el cielo y la tierra, y los colocó en el firmamento

a su voluntad y lo miran y tiemblan.

El sol se levanta para iluminarlo.

¿Quién es aquel a quien ofreceremos nuestro sacrificio?

Miró a las aguas que su poder formó

y engendró el sacrificio.

Él es Dios de dioses.

¿Quién es aquel a quien ofreceremos nuestro sacrificio?

Que no nos hiera, él que creó la tierra,

¿quién hizo el cielo y el mar brillante?

¿A qué dios ofreceremos nuestro sacrificio?