LA mayor matanza de la guerra civil española se produjo en Paracuellos del Jarama, cerca de Madrid. Cinco mil personas, de las que fueron asesinadas un millar eran niños y menores de edad, por fuerzas del Frente Popular, en unos hechos que no tuvieron paralelo en el otro bando o con otros episodios de represión durante el conflicto. Durante décadas se ha intentado negar lo que sucedió, desplazar la responsabilidad en las matanzas a supuestos espontáneos o eximir de ella a Santiago Carrillo, joven comunista procedente de las Juventudes Socialistas. Sin embargo, tras la apertura de los archivos de la antigua URSS, ha quedado establecido irrefutablemente que afirmar que Carrillo no fue responsable de las matanzas de Paracuellos no pasa de ser una mentira histórica.