En la intemperie del poema cantan
sirenas y no hay que
hacerles caso. La palabra navega. ¿Y esa mano
qué quiere decir? ¿Quién la puso
aquí mismo en escándalos de
lo bien amado/el odio
a lo que bien se ama? Las criaturas
seguras del abismo parlan,
recuperan la pérdida
para perderla otra vez. Ahora
el color rojo es piedra que
golpea palabras.