En la lucha por terminar Superman II, al menos media docena de directores fueron llamados para ciertas secuencias, incluyendo a Peter Duffel, el diseñador de producción John Barry y el veterano Andre De Toth. Y aunque todas las escenas de Gene Hackman fueron dirigidas por Richard Donner, la mayoría de ellas tuvieron que ser reescritas, re-montadas, y re-dobladas por Richard Lester, con escenas adicionales rodadas utilizando dobles. Gran parte de esto se hizo para acomodar el nuevo argumento que se necesitaba tras la marcha de Marlon Brando, otro más en la larga lista de los que demandaron a los Salkind. La elección era eliminar a Brando de la cinta o arriesgarse a un mandamiento judicial contra la secuela. Finalmente, el “legado” de Donner puede cifrarse más ajustadamente en un diez por ciento de Superman II.