El administrador de lord Peterborough demolió su casa, vendió los materiales y cobró las reparaciones al lord. Pide dinero a los inquilinos por tu paciencia. Renueva los arrendamientos y saca provecho de ellos, y vende bosques. Presta a tu lord su propio dinero. (Gil Blas[5] habló largo y tendido sobre este asunto, y te remito a él).