Morir así,
como un día vi morir
al amigo, que con rayos y miradas divinas
iluminó mi oscura juventud:
—turbulento y profundo,
bailarín incluso en la batalla—,
el más sereno entre los guerreros,
el más grave entre los vencedores,
forjando un destino sobre su destino,
fuerte, pensativo, ensimismado—:
estremeciéndose porque vencía,
jubiloso porque al morir vencía—:
dando órdenes mientras moría,
—órdenes de aniquilar…
Morir así, como un día le vi morir:
venciendo, aniquilando…