Como ocurre en todas las sociedades organizadas estatalmente, los Estados Unidos es una sociedad estratificada, y tiene un sistema complejo de clases, minorías y otros grupos jerárquicos. Las versiones emic de jerarquías de estratificación en Estados Unidos se diferencian según las clases, y tienen poco parecido con las versiones etic. James West (1945), que estudió las relaciones de clase en una pequeña comunidad del medio oeste, a la que llamaba Plainville, concluyó que había diferentes jerarquías de clase, dependiendo de si uno adoptaba el punto de vista de la «corteza superior», las «personas religiosas y buenas», las «personas que no son de iglesia», «todos nosotros las personas trabajadoras y honestas», metodistas, baptistas y así sucesivamente. Al final de todas estas jerarquías había una categoría llamada «personas que viven como los animales».
Lloyd Warner (1949) intentó estudiar la estructura de clase de Yankee City (seudónimo de Newburyport, Massachusetts), clasificando a las personas según su ocupación, fuente de ingresos, tipo de casa y zona de vivienda. La imagen de Warner de las clases de Yankee City (fig. 16.1) representa una mezcla de criterios emic y etic.
No hay duda de que los Estados Unidos son una sociedad muy estratificada. En términos de renta, al 10 por ciento de las familias más pobres de Estados Unidos les corresponde sólo un 1 por ciento de la renta familiar agregada, mientras que al 10 por ciento más rico les corresponde el 33 por ciento; al 20 por ciento más pobre le corresponde sólo el 4,7 por ciento de la renta familiar agregada, mientras que al 20 por ciento más rico le corresponde el 43 por ciento (Moorehouse y Dembo, 1985a: ll, 19).