Agradecimientos

A María Jesús Ortiz, que ha escrito mucho y bien de la Granada actual.

A Igor y Bill, por su asesoramiento científico.

A Miguel y Carmen, policías zaragozanos que me dejaron ojear los entresijos de su trabajo diario.

A Miguel Caballero, buceador de legajos y registros de Granada y experto mundial en el laberinto familiar de Federico García Lorca.

A J.I.P y A.M. por sus valiosos comentarios sobre el mundo real de la información secreta.

A Rebeca García, por su dedicación y competencia.

A Carmina, que critica y apoya desde la sala de máquinas, como siempre.