«Podrías tener el capricho de acercarte por aquí el domingo.

Digamos que tu vida se ha venido abajo; que han pasado años

desde que diste el último beso de verdad. Recorres estas calles

trazadas por dementes, junto a hoteles que han

fracasado y bares que han triunfado, intento atormentado

de los dueños del local para acelerar sus vidas.

Sólo las iglesias se mantienen en pie. Este año,

la cárcel ha cumplido setenta. El único preso

continúa encerrado, sin saber lo que ha hecho».

RICHARD HUGO, Degrees of Gray in Philipsburg