Ferdydurke se publicó por primera vez en Varsovia en la editorial Rój en octubre de 1937, si bien tiene pie de imprenta de 1938. La cubierta y las ilustraciones fueron realizadas para esta primera edición por Bruno Schulz, ardiente defensor del libro, autor ya conocido por Las tiendas de canela. Gombrowicz consideraba la conferencia pronunciada por Schulz a la salida de Ferdydurke como la más perspicaz y profunda jamás escrita sobre su obra. Anticipándose a las previsibles polémicas que suscitaría Ferdydurke, Gombrowicz no escribió un prólogo sino una especie de advertencia publicada en Wiadomosci Literackie. Pero dejó sin desvelar el misterio del título: a veces pretendía que lo había escogido porque no significaba nada y su pronunciación resultaba difícil en polaco, mientras que otras veces decía haberlo encontrado por azar en un periódico inglés. Según un investigador literario polaco, el título proviene de la novela Babbitt, de Sinclair Lewis, traducida a la lengua polaca en 1930:
… ¿Con quién dirían que me tropecé la otra noche en el restaurante De Luxe? Pues ni más ni menos que con nuestro viejo amigo Freddy Durkee, que era, hace unos años, un empleado indolente de la sociedad de navegación donde yo trabajaba (solíamos llamarle irónicamente Sr. Marmota). Era tan tímido entonces que tenía un miedo terrible del director y nunca rendía al máximo (capítulo VI).
Ferdydurke reapareció en Polonia veinte años después, en 1957, tras el deshielo provocado por el retorno de Wladislaw Gomulka. El libro alcanzó tal éxito que fue prohibido de nuevo al año siguiente, cuando la situación del país se encontraba en vías de «normalización». Y así permaneció hasta 1986, fecha en la que volvió a reimprimirse en la editorial Wydawnictwo Literackie (Cracovia). Entre tanto, el Institut Littéraire de París había hecho una edición en 1969.
Ferdydurke nunca ha dejado de circular bajo cuerda en Polonia, ejerciendo una enorme influencia, sobre todo durante el período estalinista. Considerado un libro de culto a la libertad, diversas expresiones que han sido tomadas de él pasaron a formar parte del lenguaje corriente, tales como «fachalfarra», «cuculito» o «violar por las orejas».
La edición de 1957, con algunas variantes de Gombrowicz, ha servido de base a las sucesivas ediciones polacas y constituye un texto de referencia indispensable para las traducciones.
La editorial Argos, de Buenos Aires, publicó en español (1947) la primera traducción de Ferdydurke en una lengua extranjera, con prefacio del autor. Iniciada en condiciones a veces burlescas y sin la ayuda de un diccionario polaco-español por un grupo de jóvenes partenaires de ajedrez en el ámbito del café Rex, esta traducción fue retomada por los escritores cubanos Virgilio Piñera y Humberta Rodríguez Tomeu. En esta versión española se inspiró Gombrowicz para la traducción francesa que él mismo (con la colaboración de Roland Martin, joven francés establecido en Buenos Aires) realizó y firmó bajo el seudónimo de Brone, Julliard, 1958 (Les Lettres nouvelles). Dicha traducción francesa ha servido a su vez de base, con el acuerdo del autor, para otras traducciones. La segunda traducción francesa, obra de Georges Sedir, fue establecida a partir de la edición polaca de 1957. Y se publicó por primera vez en 1973, en 10/18.