SERENIDAD

A Martin Heidegger

Sólo hay dos cosas: mi rostro desfigurado

y la dureza de la piedra.

La conciencia sólo se enciende

cuando el ser está contra ella:

y es así que todo conocimiento

y la matriz de toda figura

es una herida,

y sólo es inmortal

lo que llora.

y la noche, madre de la sabiduría

tiene la forma inacabable del llanto.