ARCHIVO MP3 RECUPERADO DE LA GRABADORA
DE ANDREA OTERO POR LA POLICÍA JORDANA
DEL DESIERTO TRAS LA DEBACLE DE LA EXPEDICIÓN MOISÉS
(…)
PREGUNTA: Profesor Forrester, hay algo que me intriga sobremanera y son los hechos presuntamente sobrenaturales asociados al Arca de la Alianza.
RESPUESTA: Ya estamos otra vez con ésas.
Profesor, hay una serie de hechos incomprensibles que aparecen citados en la Biblia, como el de esa luz…
No es «esa luz». Es la shekinah, la presencia de Dios. Hable usted con propiedad. Y sí, los judíos creían que un resplandor aparecía entre ambos querubines cada cierto tiempo, señal inequívoca de que Dios estaba junto a ellos.
O el de ese israelita que cayó fulminado por tocar el Arca. ¿Realmente cree que el poder de Dios reside en la reliquia?
Señorita Otero, tiene que comprender que hace 3.500 años los seres humanos tenían un pensamiento y una manera de relacionarse con el mundo muy diferente al nuestro. Si Aristóteles, del que estamos mil años más cerca, concebía el cielo como un montón de esferas concéntricas, imagínese lo que suponía el Arca para los judíos.
Me temo que me he perdido, profesor.
Es una mera cuestión de método científico, de explicación racional. O de su ausencia. Los judíos no podían comprender que aquella caja de oro resplandeciese con un fulgor independiente, y se limitaron a ponerle nombre y explicación religiosa a lo que tiene una explicación que se escapaba al entendimiento de la Antigüedad.
¿Y cuál es esa explicación, profesor?
¿Ha oído hablar de la Batería de Bagdad? No, claro que no. Es algo de lo que no se habla en la tele.
Profesor…
La Batería de Bagdad es un artefacto encontrado en 1938 en un museo de dicha ciudad. Estaba compuesto por vasijas de barro con un recubrimiento asfáltico, barras de hierro y cilindros de cobre. En otras palabras, un conjunto electroquímico, primitivo pero efectivo, que servía para recubrir de cobre diversos utensilios usando la electrólisis.
No es tan sorprendente. En 1938 esa tecnología tenía casi noventa años de antigüedad.
Si me deja hablar igual no queda como una idiota. Los investigadores que han analizado la Batería de Bagdad han descubierto que procedía del Antiguo Sumer, y han conseguido datarla en torno al 2500 a. C. Eso son mil años antes del Arca y cuarenta y tres siglos antes de que Faraday se autoproclamase descubridor de la electricidad.
¿El Arca es un artefacto similar?
El Arca es un condensador eléctrico. Su diseño es muy inteligente, y está pensado para acumular electricidad estática en su interior: dos capas metálicas de oro separadas por un material aislante, la madera, y unidas entre sí por dos querubines de oro que actúan como terminales positivo y negativo.
Pero si es un condensador, ¿cómo almacena electricidad?
La respuesta es muy prosaica. Los objetos del Tabernáculo y del templo estaban realizados en cuero, lino y pelo de cabra, tres de los cinco materiales que mayor cantidad de estática generan. Bajo las condiciones atmosféricas adecuadas, el Arca podía soltar descargas de 2.000 voltios. No es de extrañar que sólo la pudiesen tocar los «elegidos». Puede apostar que esos «elegidos» llevaban guantes bien gruesos.
¿Luego usted afirma que el Arca no procede de Dios?
Señorita, nada más lejos de mi intención. Afirmo que Dios pidió a Moisés que guardase sus mandamientos en lugar seguro, un objeto para ser venerado por los siglos, para ser el centro de la fe judía.
Y que los seres humanos aumentaron de manera artificial la leyenda del Arca.
¿Y qué hay de las calamidades como el derrumbe de los muros de Jericó, las tormentas de arena o la lluvia de fuego que arrasa pueblos enteros?
Invenciones o leyendas.
¿Rechaza entonces de plano el que el Arca pueda provocar desgracias a su paso?
Absolutamente.