«Querido Justo, mamá te agradece más que nunca que me hayas ayudado a sonreír. Creo que lo había olvidado. El día menos pensado ponemos luces en el jardín y hacemos que las canciones lleguen a su destino. Al final, ya ves, la tía Visitación tenía razón. Hay que bailar. Sea como sea, hay que bailar. Me voy a la cama con tu beso de buenas noches… Que te quiero pequeño.

Todo irá bien.

Mamá, Te Adora».