CONGRUENCIA

Diferentes partes de la estructura referencial de una persona pueden ser expresadas por diferentes sistemas representacionales. Esto puede ocurrir en forma simultánea. Hay dos posibilidades lógicas cuando dos sistemas representacionales distintos están expresando simultáneamente diferentes partes de la estructura de referencia de la persona.

Primero, la parte de la estructura referencial de la persona que es expresada por un sistema representacional, calza, o se adecua con la parte de la estructura referencial de la persona que es expresada por el otro sistema representacional. Nos referimos a esta situación como un mensaje doble consistente, o congruencia, o comunicación congruente, de la persona involucrada.

Segundo, la parte de la estructura referencial, que es expresada por un sistema representacional, no se adecua con la parte de la estructura de referencia expresada por el otro sistema representacional. Nos referimos a esta situación como un mensaje doble inconsistente, incongruencia o comunicación incongruente. Por ejemplo, si en una sesión terapéutica un cliente está sentado tranquilamente en una silla, hablando con una voz baja y controlada y dice:

Estoy realmente furioso. A la mierda, esto no lo voy a aceptar.

Tenemos un ejemplo clásico de un mensaje doble inconsistente o comunicación incongruente. El sistema digital (lenguaje) y el sistema analógico (actitud corporal y calidad de la voz) son inadecuados, son incongruentes.

Una de las situaciones más empobrecedoras que hemos encontrado en terapia es cuando una persona mantiene aspectos contradictorios en su estructura referencial. Generalmente estas partes contradictorias aparecen como dos generalizaciones contradictorias aplicables a una misma área de comportamiento. Habitualmente, una persona cuya estructura referencial contiene estas dos generalizaciones inconsistentes, se siente inmovilizada, muy confundida y oscilando entre dos formas inconsistentes de comportamiento. Esto puede ser reconocido por el terapeuta cuando ve que hay una incongruencia o un mensaje doble inconsistente.

Nótese que en cada una de las técnicas que hemos presentado en este capítulo, la estrategia general que el terapeuta ha adoptado es aquella especificada explícitamente por el metamodelo para desafiar y ampliar los aspectos empobrecidos del modelo del cliente. Lo característico es que aparezcan como recuperación (actuación) o creación (fantasía dirigida) de dobles vínculos terapéuticos, una estructura de referencia que contradice y, por lo tanto, desafía y limita las generalizaciones en el modelo del cliente. En este caso, la comunicación incongruente es, en sí misma, un indicador de los dos aspectos de la estructura de referencia inconsistente de la persona, dos generalizaciones que pueden servir como estructuras de referencia contradictorias entre ellas. La estrategia del terapeuta aquí es poner en contacto las dos generalizaciones contradictorias. Esto puede lograrse en forma más directa, llevando las dos generalizaciones al mismo sistema representacional.

Por ejemplo, durante una sesión terapéutica, el terapeuta, usando técnicas del metamodelo, ayuda al cliente a identificar una generalización en su modelo:

Yo debería, siempre, apreciar a mi madre por todas las cosas que ella hizo por mí.

Nótese, que sólo con las técnicas del metamodelo esta estructura de superficie presenta al terapeuta varias posibilidades (el operador modal debería; los cuantificadores universales siempre, todas; la falta de índice de referencia del sustantivo cosas). Sin embargo, cuando el cliente estaba pronunciando esta estructura de superficie, el terapeuta observó que tenía su puño derecho apretado y que golpeaba suavemente el brazo de la silla donde estaba sentado. Esto identifica un mensaje incongruente. Ignorando por el momento las violaciones a lo bien formado en terapia de la estructura de superficie del cliente, el terapeuta decide llevar las partes incongruentes del comportamiento del cliente al mismo sistema representacional, esto lo hace pidiendo al cliente que exprese el aspecto analógico de la comunicación incongruente en el sistema digital. Eventualmente, el cliente responde con la siguiente estructura de superficie:

Yo debería apreciar, siempre, a mi madre por todas las cosas que ella hizo por mí, pero siempre estuvo de parte de mi padre y eso me enfurecía.

Usando técnicas del metamodelo, estas dos generalizaciones contradictorias fueron mantenidas en contacto en el mismo sistema representacional hasta que las generalizaciones fueron objetadas y el cliente llegó a un nuevo modelo —más rico y detallado—, en el que apreciaba a su madre por algunas acciones y tenía resentimientos por otras. Una indicación de que el modelo del cliente se ha enriquecido es cuando hay comunicación congruente, donde previamente hubo comunicación incongruente. Esta alineación de los sistemas de representación separados de las personas que previamente había sido incongruente es una experiencia poderosa para un cliente[53], y generalmente los terapeutas experimentados se dan cuenta, muy bien, cuando esto ocurre.