Hemos presentado un extenso conjunto de ejemplos explícitos, que pueden ser usados por el terapeuta para identificar el fenómeno llamado «lo bien formado en terapia». Esto constituye el metamodelo explícito para terapia. Ya que reconocemos que nuestro metamodelo cubre sólo una parte de la comunicación verbal que es posible en terapia, presentaremos en el próximo capítulo ejemplos de terapia en los cuales hemos restringido totalmente al terapeuta a nuestro metamodelo. Esto resulta artificial si consideramos que el metamodelo es un conjunto de instrumentos diseñado para ser usado conjuntamente con los diferentes tipos de enfoques que hay en terapia El metamodelo está específicamente diseñado para ser aplicado en la comunicación verbal; es un caso especial del proceso de modelamiento que hacemos nosotros como seres humanos. Generalizaremos el metamodelo a otras formas de sistemas humanos de representación en el capítulo 6.